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Los candidatos presidenciales del PRD y del PLD se pronunciaron ayer, por separado, a favor de bajar el tono agresivo de la campaña electoral. Hipólito Mejía, del PRD, dijo que la violencia verbal no favorecía a nadie y expresó su endoso a la iniciativa de la Iglesia Católica, pero advirtió que si me tiran, tiro. Danilo Medina, por su lado, aboga por un debate de ideas para que se le diga a la población cómo se piensan solucionar los grandes problemas del país. Reiteró que él no toma iniciativa en atacar, sino que reacciona.
El candidato presidencial por el Partido Revolucionario Dominicano, Hipólito Mejía, se mostró ayer de acuerdo con la posición de la Iglesia Católica sobre la necesidad de la firma de un Pacto de Civilidad en la campaña electoral, considerando que la violencia y la rispidez no benefician a nadie.
Mientras asistía a la Feria Nacional Ganadera, organizada por la Federación Nacional de Productores Agropecuarios (Fenagro), dijo que es necesario bajar el tono de la campaña, aunque afirmó es a él a quien el Gobierno le tira con fuerza, dada la amplia ventaja que le lleva al candidato oficialista.
Al disertar sobre la situación del sector agropecuario y sus preocupaciones en cuanto a la necesaria rentabilidad, el exmandatario afirmó que no se explica las razones que tiene el Gobierno para no apoyar la producción agropecuaria local y afirmó que los países que más han logrado exportar su producción agropecuaria lo han hecho por el fuerte soporte en subsidios a sus productores.
Mejía instó a los empresarios del agro a no desmayar ni tener miedo, ya que consideró necesario producir como antes rubros como el café, cacao y ganado de gran calidad.
Mejía aseguró que se revestirá de la paciencia de Job y la sabiduría de Salomón para salir airoso en las elecciones.
La clave
Auditorías vulgares
El jefe de campaña del candidato presidencial del PRD, César Cedeño, definió como una vagabundería vulgar y asquerosa por parte del Gobierno y del PLD sacar ahora auditorías contra los dirigentes reformistas Amable Aristy Castro y Héctor Rodríguez Pimentel, y del exalcalde de La Vega Fausto Ruiz. Recordó a Marino Vinicio Castillo que Mejía era un próspero empresario agrícola, cuando asumió el poder.
