LA HAYA. Cientos de miles de holandeses vestidos de color naranja acudieron a las calles este sábado para celebrar el primer Día del Rey de la historia en honor de Guillermo Alejandro, quien subió al trono hace un año.
El popular rey y su esposa, nacida en Argentina, la reina Máxima, fueron ovacionados por miles de entusiastas admiradores en De Rijp, pueblo de pescadores del noreste.
La reina Máxima lanzó un balón hacia la boca de una reproducción de una ballena, que simboliza el pasado del lugar como sitio de procesamiento ballenero, entre atronadores aplausos, tras lo cual pasó a recibir flores de la gente.
De ahí la procesión real, que incluía a la reina madre, ahora princesa Beatriz, que abdicó el año pasado luego de 33 años de reinado, se dirigió hacia el sur, a Amstelveen, cerca de Amsterdam. La pareja real era esperada por sus tres hijas, la princesa heredera del trono Amalia, de 10 años, la princesa Alexia, 8 años y Ariane, de 6.