Nagua. Un padre envenenó a sus dos hijas menores de edad y luego se suicidó porque alegadamente tenía dos meses separado de la madre de las menores y esta no quería volver con él, según versiones ofrecidas por los vecinos del victimario.

Todo comenzó ayer a las 10:00 de la mañana cuando Julio Arias (alías Raúl), de 32 años, se presentó en la casa de Brígida Ortega, abuela de las niñas, para buscar a Yaulaldy, de 9 años y Raulandy Arias Ortega, de 8. Tras marcharse de la residencia, en la calle 13 del sector de San José de Villa, Arias fue a su casa ubicada en la prolongación calle principal de Río Mar, donde les dio un chocolate con leche envenenado.

Cuando ellas comenzaron a sentirse mal, el homicida decidió tomarse el veneno restante. Aunque a las 11:20 de la mañana las niñas llegaron con vida al hospital Doctor Antonio Yapor Heded, cinco minutos más tarde fallecieron, tal como explicó el doctor Rafael de la Cruz, médico de emergencias.

Los vecinos indicaron que la madre de las menores, Dilania Ortega, salió en la madrugada de ayer hacia Santiago para comprar ropa con la intención de venderla. No fue hasta el mediodía que llegó a su casa y se enteró de la nefasta noticia de la muerte de sus hijas. La tarde del martes pasado, dijeron los vecinos, se habría producido una discusión entre Arias y su mujer, ya que este le había pedido que se reconciliaran pero ella se negó a hacerlo.