El domingo, Alexander Sánchez llamó a su pareja, Yareimi Féliz Rosa, para que fuera a su casa a buscar un dinero para la hija de ambos de apenas dos meses. Cuando ella llegó a la vivienda, en La Yuca de Naco, Distrito Nacional, encendió el radio a todo volumen para que los vecinos no oyeran nada, la estranguló y de inmediato fue a jugar baloncesto como si nada hubiera pasado. Ahora está prófugo.
Sánchez, de 23 años, cometió el homicio a pesar de que desde hace 21 días tenía una orden de alejamiento de Féliz Rosa, de 19, a quien había intentado estrangular en una ocasión anterior.
Los familiares de la joven, embargados por el dolor y la impotencia, afirmaron que la relación era tormentosa, que Sánchez la maltrataba, y se quejaron por la actuación de la Justicia que lo dejó en libertar, solo tres días despues de que intentó matarla la primera vez.
De su lado, Brunilda Rosa, madre de la víctima, ahogada en llanto dijo: “ay Dios mío, me mató a mi hija, la conquistó para matarla, la maltrataba, yo me la llevé para mi casa, pero ella cuando lo metieron preso no quiso que lo mandaran para La Victoria, ella creía que él iba a cambiar, que no le iba a hacer daño”.
Eljoven vivía a menos de 100 metros de la muchacha. El hecho ocurrió el domingo alrededor de las 6:00 de la tarde, pero los familiares se dieron cuenta a las 9:00 de la noche.
Mensaje. A los pocos minutos de haber estrangulado a Yareimi, Sánchez publicó un mensaje en su cuenta de Facebook diciendo lo siguiente: “Mami, papi, hermanas mías y allegados, perdón por equivocarme, pero créanme personas del mundo, nunca jueguen con los sentimientos de alguien que realmente le quiere. Adiós”.
Justicia. Según cuenta la familia de la joven, Alexander llamó a su madre para decirle lo que había hecho y cuando la señora llegó a la casa, vio el cadáver y dio la voz de alerta.
“Nosotros esperamos que la justicia ahora pueda poner de su parte y atrape a ese individuo, nosotros lo encontramos ahorcándola hace 21 día y le pusimos la querella, pero en menos de 24 hora lo soltaron”.
“La justicia es desconsiderada, hacen anuncios sobre la violencia de género, sin embargo al victimario lo sueltan para que vuelva a cometer el hecho, ahora mira la muerte de mi sobrina es noticia”, expresó David Almánzar, tío de Yareimi.
Molestos e indignados, los familiares quieren saber cuál fue el juez que tomó la decisión de dejarlo en libertad, “los jueces son los culpables de esta muerte”.
Contaron que a los tres meses de iniciar el noviazgo, Yareimi salió embarazada, y cuando cumplió ocho de gestación se fue a vivir con Alexander.
“Ella siempre tenía moretones en el cuerpo, y le preguntábamos por qué no lo dejaba, y ella decía que le tenía miedo”, expresaron unas primas.