Un hombre mató a tiros a su exesposa y a la madre de ella la noche de este lunes en el sector Los Guaricanos, de Santo Domingo Norte. Las víctimas son Confesora Toribio Roque de 72 años y su hija Elida Cabrera Toribio, de 36. El supuesto autor del doble homicidio es Juan Recio, exesposo de Elida, con quien procreó tres hijos. Los cadáveres de las víctimas se encuentran en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) en el hospital Marcelino Vélez Santana. Hoy/ Arlenis Castillo/01/01/2019
Un hombre acabó con la vida de su expareja y de su suegra al tirotearlas la noche del pasado domingo en su casa, en Los Guaricanos. Antes de darse a la fuga, el feminicida amenazó de muerte a los tres hijos que había procreado con su exmujer.
Juan Recio primero ultimó a su suegra, Confesora Toribio, de 72 años, y luego fue tras su exesposa, Elira Cabrera, de 36, de quien se había separado cinco meses atrás y con quien había engendrado tres hijos.
Al momento de cometer el crimen, dos horas antes de que cerrara el año 2018, Recio no se encontraba bajo los efectos del alcohol ni sustancias narcóticas, según dijeron testigos del hecho.
Empero, los vecinos que conocían la naturaleza de la relación afirmaron que Recio abusaba verbalmente de su pareja sin llegar al daño físico y había mostrado tendencias suicidas.
Allegados a las víctimas revelaron que Cabrera, quien ejercía como secretaria de una escuela pública, había interpuesto una denuncia en contra de su exmarido, sin embargo, esta no le dio el debido seguimiento por temor a que ocurriera una tragedia si él se enteraba.
También describieron que en la habitación donde tuvo lugar el suceso había cinco impactos de bala en la puerta y uno en la pared, además de aquellos que impactaron a las dos mujeres.
Los restos de ambas, madre e hija, fueron entregados ayer a sus familiares tras ser examinados y preparados por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) para ser velados en su residencia, en el sector Los Guaricanos, de la capital.
Protección a los hijos. Ante la amenaza que lanzó Recio de que liquidaría a sus hijos, estos fueron puestos bajo custodia de la Policía Nacional a fin de garantizar su protección hasta que consigan aprehender al fugitivo y ponerlo a disposición de la justicia.
De la relación entre Recio y Cabrera nacieron tres varones: uno de 19 años, uno de 16 y otro de 14.
Solidaridad. Frente al hogar donde ocurrió el siniestro se conglomeraron decenas de personas de la vecindad para solidarizarse con los familiares de las fallecidas, quienes lloraban desconsoladamente.
Ana Luisa Sierra fue la más afectada, ya que en solo una noche de fin de año había perdido a su hermana y a su madre a manos de un hombre que amenazó a sus sobrinos y que en estos momentos se encuentra prófugo de la justicia.