La violencia intrafamiliar cobró ayer la vida de  otra mujer. Se trata de Yanet Altagracia  Rojas Cuevas, de 47 años, quien recibió 11 puñaladas de su pareja, Pascual González Germán (Niño), quien  posteriormente intentó suicidarse.

El hecho se produjo en la residencia de ambos, situada en la calle U esquina B del sector La Francia, en  Villa Duarte, Santo Domingo Este.

El agresor fue identificado como un comerciante  de 45 años, quien fue trasladado a un centro de salud con una herida en el pecho que se infirió a sí mismo.

El vocero de la Policía, general Máximo Báez Aybar, informó  en  su cuenta de Twitter @MaximoBaezaybar, que en la escena se encontró una  nota que decía: «Yo perdono una vez, pero dos no». Hallaron siete botellas de cerveza.

Según una vecina de la pareja, María Molina,  el asesino  le infirió once puñaladas durante la noche y permaneció junto a ella, y se infirió la puñalada en el pecho al notar la presencia de las autoridades que habrían la puerta de hierro con una sierra eléctrica. Explicó que tenían un colmado y que vivían detrás.

Dijo que el domingo celebraban en el colmado  la despedida de la mujer, que viajaría hoy a España.

 Indicó que Rojas Cuevas vivía en España con sus dos hijos, que no eran de González Germán, y que tenía  dos meses en el país pero que  ya tenía que regresar.

Molina precisó que no entiende cómo pasó eso si ellos se llevaban bien,  eran muy amorosos y  nunca los vio discutir.

Esa versión la confirmó el hermano de Yanet Altagracia, Jhony Williams, quien expresó que   aunque no procrearon hijos,  mantenían una buena relación desde hace 15 años.

Según Williams, quien no estaba en la fiesta, los vecinos le  contaron que  discutieron en la noche y luego él se molesto y se puso a tomar  bebidas alcohólicas en el colmado  y le  regaló  a los clientes. Dijo que cerraron el negocio a las 12:00 de la noche.  

Explicó que su cuñado era un hombre reservado y que   abría el colmado a las 6:00 de la mañana y al ver que a las 10:00 estaba cerrado, los vecinos  llamaron  y al no responder dieron la voz de alerta a la Policía.