SANTIAGO. El hombre que mató de 26 puñaladas a su expareja, en el sector Pueblo a Nuevo, se entregó a la Policía la tarde de ayer, en momentos en que los restos de su víctima Kenny Liriano Abreu, eran velados en una funeraria. Más tarde fueron sepultados en el cementerio de El Ingenio.
Al llegar a las oficinas del Departamento de Investigaciones Criminales y Homicidios, Francisco Rosario, El Niquelado, solo dijo que había tenido una leve discusión con su ex pareja y que cometió un error.
Según el informe de la Policía Rosario residente en el sector Pueblo Nuevo confesó a los investigadores que mató a la joven por motivos pasionales.
El sepelio. Decenas de personas acudieron al sepelio de Liriano Abreu para solidarizarse con la familia, en medio de muestras de pesar y exigencias de justicia.
El padre de la víctima, Alfredo Liriano Peña, dijo que la familia estaba muy mal por la muerte inesperada de su hija.
Ella era una joven alegre, sencilla, trabajadora. Se mantuvo por casi año y medio en una relación no muy formal; en varias ocasiones se separaron, pero nunca me dijo que tenía problemas serios. No sé los motivos reales por los cuales él la asesino, expresó.
Judith Molina y Nerys Ferreira, amigas de Kenny, quien trabajaba como estilista en un salón de Villa Olga, expresaron que la muchacha era tranquila y trabajadora.
Molina dijo que el victimario no era una persona muy agradable que digamos, pero no tenía un compartiendo agresivo.
Era un hombre obsesivo. Es un dolor muy grande, ella era mi cliente de un centro de uñas, era creativa y buena amiga, nos daba consejos, sostuvo. Pidió a las autoridades hacer justicia, porque es una víctima más de la violencia.
Vecinos y amigos del homicida dijeron que se dedicaba a la venta y compra de joyas y que se separó de su primera esposa, con quien procreó dos hijos, para vivir con Liriano.
La clave
Informe policial
La Policía dijo que Rosario pasó a recoger a la joven a su trabajo y que en el trayecto la agredió. Indicó que el victimario luego de apuñalar a la mujer, la arrojó aún con vida a la autopista Joaquín Balaguer, próximo al municipio de Villa González. Murió horas después.