TEGUCIGALPA, Honduras.-Hombres armados acribillaron a tiros el domingo al ex ministro de la Juventud de Honduras Marco Tulio Tróchez, informó la policía.
Los delincuentes huyeron. Precisó que unos tres desconocidos aguardaron la llegada de Tróchez, de 40 años, quien recibió por lo menos siete impactos de bala al intentar ingresar a su vivienda en La Ceiba, sobre la costa de Honduras en el Atlántico, a 400 kilómetros al norte de Tegucigalpa.
El ataque ocurrió cuando el ex ministro llegaba en automóvil a su apartamento en el barrio Toronjal de La Ceiba.
Su amigo Fernando Meza sufrió cuatro heridas de bala, pero su estado es satisfactorio, dijo la policía en un comunicado.
Meza dirige en La Ceiba el programa Vida Mejor, con el que el gobierno resuelve problemas de elementales de vivienda, empleo y alimentación a miles de hondureños pobres.
La policía dijo que busca intensamente a los asesinos de Tróchez y que investiga el crimen. “Aún no hay ningún sospechoso arrestado en relación con este asesinato”, afirmó.
Tróchez fue ministro de la Juventud en el gobierno del presidente Porfirio Lobo Sosa (2010-2014) y poseía muchos negocios en su pueblo natal de La Ceiba. Según el gobierno, al menos 14 personas son asesinadas diariamente en Honduras, donde la tasa de homicidios el año pasado fue de 57 por cada 100,000 habitantes.
Un país violento.- Honduras es uno de los países más peligrosos del mundo con 5,000 asesinatos violentos al año, de los que apenas el 9% son aclarados por las autoridades.
Estadísticas oficiales establecen que 14 personas son asesinadas al día en Honduras, donde la tasa de homicidios ascendió el año pasado a 57 por cada 100,000 habitantes, cuando la mundial es de 6.2. Por otro lado, el principal reto de Honduras ante la
elección de los nuevos 15 magistrados que integrarán la Corte Suprema de Justicia, prevista para el lunes, estará en lograr una mayor independencia de ese poder del Estado. Así lo señaló ayer el analista hondureño Raúl Pineda, quien dijo a Efe que el desafío de Honduras es “procurar que la justicia sea independiente, no solo de las fracciones políticas, sino también de la estructura de las Fuerzas Armadas y la Policía». Los nuevos magistrados deben actuar “en función de los intereses de la nación y los principios de la equidad y la justicia”, subrayó Pineda.