Homenaje a familia  Castaños-Guzmán

Homenaje a familia  Castaños-Guzmán

Moca celebró un acto de justicia ciudadana. El senador José Rafael Vargas ha tomado la iniciativa de consagrar en el haber de esa histórica ciudad un hecho fundamental: rendir homenaje a sus grandes hijos.

Antes presenciamos actos similares al Presidente Ramón Cáceres y doña Sisa; Familia De la Maza; Dr. Eduardo García Vásquez; Juan Rodríguez; Lic. Juan M. Contín; Dr. Carlos Ma. Rojas; Julio Jaime Julia, ahora al Dr. Julio César Castaños Espaillat y su esposa Nervina.

Moca es ciudad que guarda gran caudal histórico y trascendencia en su vida republicana. Los mocanos se enorgullecen, de sus grandes hombres que los engrandecen.

Nos reunimos los que aman o guardan grandes recuerdos de esta histórica ciudad, para rendir homenaje a otro hijo preclaro de los últimos cincuenta años, por lo que me uní a este memorable acontecimiento evocando recuerdos imborrables.

Estudiando el bachillerato en Moca, entre 1953-57 presencié un gesto extraño y de profundo valor familiar y cultural.

Nervina Guzmán, esposa de Julio, llegó una mañana al Liceo y sorprende al estudiantado con su elegante porte, joven, hermosa y de atrayente personalidad. Este se alborota. Recién casada con Julio fue a presentar examen de algunas materias, para optar por el Bachillerato de Filosofía y Letras, básico para estudiar Derecho. Ya Julio era abogado.

Estudió y se hizo abogada para trabajar con su esposo.

Crearon familia ejemplar, Dilia, Julio César, Dilia Emilia, Julio Amado, Julio Miguel y Servio Tulio.

En 1956 Julio ingresó como profesor de Economía Política en la Facultad de Derecho. Era el más joven de todos. Fui su alumno.

Buen maestro, sabía enseñar, sus cátedras amenas y participativas, crearon simpatías entre sus estudiantes.

Desaparecido Trujillo en mayo de 1961, un grupo de estudiantes de Derecho contactamos a Castaños en julio, en busca de apoyo para formar la FEU, especie de replica a la cubana que había liderado Fidel Castro, quien fue el ejemplo revolucionario de nuestra generación.

Visitamos a Castaños en su residencia de la Sánchez Ramírez, quien nos brindó apoyo para el proyecto junto a Froilán Tavárez y José Caro Álvarez que fueron contactados y apoyaron el mismo que tenía por finalidad celebrar una manifestación frente a la Rectoría para proclamar la acción, la que terminó bloqueada por la PN y el encarcelamiento de Cucho Rojas, único orador del acto.

Así comenzó Castaños a ganar amplio apoyo y simpatías entre los 3,000 estudiantes que entonces tenía nuestra Universidad.

Para fines del año Castaños tenía elaborada la ley de Autonomía Universitaria, en enero fue aprobada y el mismo mes escogido Rector Provisional, luego ratificado.

 Fue el primero de la UASD.

Al estallar la revuelta de 1965 fue de los primeros dominicanos buscados para organizar un Gobierno Provisional, aceptable a los sectores en pugna. Fui testigo de las gestiones a esos fines, finalmente no aceptó la oferta. Residiendo uno al lado del otro conocí detalles de sus pasos en diversas altas funciones desempeñadas. Ministro de Trabajo, Educación, Procurador Gral., funciones todas servidas con dignidad, eficiencia y honestidad y Nervina siempre colaborando con él y apoyándolo.

Su trayectoria llevó que su nombre fuera nominado dos veces para la Presidencia de la República, brillando siempre su inteligencia, honestidad y talento.

Así los hombres se convierten en hacedores de la historia.

El homenaje de Moca a Julio César será inolvidable.

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