Recientemente, la Asociación Dominicana de Rehabilitación (ADR) realizó una eucaristía-homenaje póstumo por el fenecido monseñor Amancio Escapa.
El acto religioso se realizó en el Salón de Conferencias de la Escuela de Educación Especial Dr. Jordi Brossa.
Celso Marranzini, primer vicepresidente de la Junta Directiva Nacional de la entidad sin fines de lucro, dijo que con pesar, la familia ADR despidió a uno de sus más fieles colaboradores.
“Monseñor Escapa fue un apoyo constante a Rehabilitación, sus misas y sus mensajes cada aniversario inspiraban a seguir trabajando por los demás”, expresó Marranzini.
Destacó, además, que existía un “verdadero afecto entre él y mi madre, a tal punto que cuando, ya muy enfermo, mi hermano Alfredo lo visitó, le dijo ‘cuiden mucho a la viejita’…”.
Otra de las cosas que relató sobre el fallecido religioso, es que “siempre se reía conmigo y me decía ‘muchacho tremendo’, cuando le decía que era mi cura querido”.
Añadió: “Compartía con él siempre en las reuniones que se hacen cada cierto tiempo en la Universidad Católica Madre y Maestra y la Conferencia del Episcopado. Normalmente, comíamos juntos y luego de salir de la CDEEE me decía, ‘No te vuelvas a meter en nada de eso’ y riendo le respondía: “N me meto, me meten”… finalizó Celso Marranzini.