La República Dominicana acaba de pasar por un proceso electoral donde finalmente se pusieron de manifiesto los números que habían arrojado las encuestas.
Luis Abinader triunfó con más del 50 más 1, lo que le permite ser el presidente electo en la primera vuelta. Una campaña matizada por la virulencia, la falta de respeto y las acusaciones inmerecidas.
Pero creemos ciertamente que es momento de poner el ejemplo, como se habla en un lenguaje llano, estableciendo las condiciones para poner a raya aquellas personas que de manera irresponsable llevaron acusaciones directas a personas simplemente por tratarse de política.
En aras de la política, se cometieron muchas injusticias, se abusó de la campaña electoral y se hicieron acusaciones vinculaciones de narcotráfico no solo a instituciones políticas como en el caso del PRM.
Es fácil decir que una persona está vinculada, que el partido tiene personas vinculadas o que hay en el Congreso Nacional personas ligadas al narcotráfico. Es muy distinto decir que una persona con las características humanas, con la humildad, con la profesionalidad y con el respeto con que se maneja el profesor Roberto Fulcar haya sido sindicado como persona relacionada con un cartel de narcotráfico.
Yo considero que en pro de fortalecer la democracia de la República Dominicana, nosotros debemos poner el ejemplo para que se erradique ese tipo de manifestaciones que nada aportan a la política y que solo hacen que la campaña se torne virulenta, agresiva y despreciable.
Es por esto que muchos empresarios, comerciantes y personas de alto perfil se limitan a la participación en la política, porque aquellos políticos profesionales no tienen escrúpulos a la hora de emitir opiniones; opiniones que en un alto porcentaje no se acercan a la verdad y que obedecen simplemente a una estrategia de campaña.
Creo que es momento de recoger todos esos agravios, acusaciones e imputaciones que se hicieron. Estamos hablando específicamente de la acusación que se hizo sobre ese gran hombre, profesor, hombre humilde, leal, que se vio paso a paso y que estuvo desde el día cero y hasta el día de hoy con el presidente de la República, Luis Abinader.
Es momento de poner el ejemplo con el profesor Roberto Fulcar.