NEIBA-   Familiares, amigos y vecinos  de  Nafi Sánchez Cuevas, muerta después de un parto, protestaron ayer frente a las instalaciones del hospital y pidieron  la cancelación de la directora  y del personal médico que practicó el parto, por considerar que hubo  negligencia.

Sánchez Cuevas, de 22 años,  falleció  cuando era trasladada del San Bartolomé, de aquí, al  Jaime Mota, de Barahona. 

Moradores  de Villa Jaragua, donde residía la joven parturienta, se trasladaron en camiones para protestar con pancartas en mano.

En algunas de las pancartas que enarbolaban se leía: “No más muertes en el hospital San Bartolomé”, “No más mujeres ni niños muertos en el hospital San Bartolomé”.

El cadáver fue examinado por el médico legista, Freddy Bienvenido Medina Peña, quien determinó que la joven murió por hemorragia atonía uterina.

El padre de  Sánchez Cuevas, José Sánchez Santana, dijo que  tuvo la hemorragia, luego de que le suministraron un medicamento llamado Pitocín.

Los familiares de la joven advirtieron que no cederán  hasta tanto  sea destituida la directora del centro, doctora Martha Gómez y el personal actuante en el parto.

Mientras la criatura permanece en condición estable con la familia de su madre, junto a sus tres  hernanas, hoy huérfanas.

Según los médicos, la joven  padecía de un cuadro de anemia agudo.