Altamira, Puerto Plata
A pesar de que se maneja con una subvención de RD$340,000 mensuales, la administración del hospital Joaquín Mendoza de Altamira se empeña en ofrecer “cada día servicios de calidad a sus pacientes”.
Así lo asegura el director del hospital, doctor Víctor Montán, quien lamentó tener que destinar el 40% de su exiguo presupuesto al pago de los medicamentos que le suministra mensualmente el Programa de Medicamentos Esenciales (Promese), un compromiso que “no se está cumpliendo con regularidad en favor de nuestro hospital”.
Pese a este inconveniente, Montán dijo que el centro de salud no permite que sus pacientes incurran en gastos en comprar los materiales gastables cuando estos requieren de una cirugía o del traslado en la ambulancia de este centro de salud hacia Santiago o al municipio San Felipe de Puerto Plata.
Cuando Promese no le envía los medicamentos a tiempo, sostuvo Montán, ellos los compran a suplidores privados porque son “tipos de medicinas que bien pueden salvar una vida en nuestra comunidad, lo que demuestra que estamos manejando con pulcritud los recursos que nos envía Salud Pública”.
Está limpio. Aunque fue sometido a trabajos de ampliación y remodelación hace cuatro años y aún los trabajos no se han terminado, el hospital Joaquín Mendoza luce limpio, organizado e higienizado.
A juicio del director, al concluir las obras el hospital será un modelo. “Estamos más que convencidos de que al término de esta obra, tendremos uno de los centros de salud más modernos de nuestra provincia”.
Montán dijo que ha sido positivo esperar la terminación de estos trabajos porque “estamos seguros que seguiremos dando buenos servicios a las personas que consultan a diario en este hospital”.
Recordó que estos trabajos iniciaron en el 2013 con un presupuesto de parte del Ministerio de Obras Públicas de unos RD$42 millones pero tiempo después la remodelación de los hospitales fue transferida, por disposición del presidente Danilo Medina, a la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe), por lo que desconoce a cuánto asciende el monto de la obras actualmente.
Explicó que dentro del nuevo modelo de gestión de salud que se implementa en el país, ahora el hospital de Altamira será de 26 y no de 40 camas como había sido la normativa porque solamente se permitirá que haya dos pacientes por habitación y no cuatro como acostumbran a tener regularmente los centros de salud públicos del país.