El suflé es un plato ligero elaborado con huevo (en concreto con las claras de huevo) batido combinado con otros ingredientes y hecho al horno, que se puede servir como plato principal o bien como postre.
“Souffler” es una palabra francesa que significa ‘soplar’ o ‘inflar’. Existen suflés de muchos tipos, casi tantos como alimentos encontramos en los mercados Todos ellos, eso sí, con un factor común: la inclusión de claras de huevo entre los ingredientes principales.
A la hora de utilizarlas, éstas deberán ser batidas a punto de nieve, que debe quedar muy firme si queremos conseguir esa textura tan esponjosa y ese aspecto ‘abombado’ tan característico que presentan este tipo de preparaciones.
Esta es una receta rápida y fácil con la que puedes sorprender tus comensales.

Recetas

Suflé de queso

1 litro y medio de leche
4 cucharadas soperas de harina
Media docena de huevos
1/2 libra de queso gruyère rallado
Sal y pimienta
Preparación. Hacer una bechamel con la leche y la harina, y añadirle el queso gruyère. Una vez hecha, apartar del fuego. Separar las claras de las yemas. Mezclar las últimas con la bechamel. Batir las claras a punto de nieve, mezclar con la bechamel con una espátula haciendo movimientos envolventes (para que no se baje) y verter en un molde previamente untado con mantequilla. Meter en el horno, previamente precalentado a 200 grados, hasta que suba, 20 minutos aproximadamente. Hay que tener cuidado de no abrir el horno durante la cocción. Servir inmediatamente.

Suflé de espinacas y queso cremoso a las finas hierbas

1/2 libra de espinacas

4 huevos
1/2 barrita de mantequilla
1 taza de harina
2 tazas de leche entera
1/2 libra de queso cremoso a las finas hierbas
1 pizca de nuez moscada rallada sal
Preparación. Precalentar el horno a 170º. Engrasar con la mantequilla el fondo y las paredes de cuatro moldes individuales de suflé. Separar en dos cuencos las yemas de las claras. Escaldar las espinacas en agua salada durante un minuto, escurrirlas bien, ponerlas en la batidora hasta obtener un compuesto homogéneo y echarlas en el cuenco de las yemas. Batir con varillas eléctricas hasta obtener una crema verde. Calentar la mantequilla restante con la harina en una cazuela durante dos minutos hasta que la harina se tueste ligeramente. Incorporar la leche, poco a poco y removiendo sin cesar, hasta que quede una crema densa. Retirar del fuego y dejar enfriar un poco. Agregar el queso cremoso y el batido de espinacas y yemas, sazonar con nuez moscada y mezclar todo bien. Montar las claras a punto de nieve con varillas eléctricas, verter en la mezcla anterior y remover de arriba abajo, sin batir, para evitar que se bajen. Rellenar los moldes hasta dos tercios de su altura y meter al horno a 170º entre 20 y 25 minutos, hasta que suban y se doren. Retirar del horno y servir antes de que se caigan los suflés por la pérdida de temperatura.

Suflé de limón

1 limón
1 yogur natural
4 huevos
5 cucharadas de azúcar glas (de confitero)
1 cucharada de harina
Mantequilla
1 cucharada de azúcar en polvo
Preparación. Lavar el limón. Quitarle la cáscara y exprimir el jugo. En un tazón, mezclar el yogurt. Luego, agregar la harina, el jugo de limón, la cáscara del limón, el azúcar y finalmente las yemas de los huevos. En otro tazón, mezclar las claras de huevo hasta que queden firmes. Añadir el azúcar glas. Agregar esta mezcla a la mezcla del yogurt del paso anterior. Verter la mezcla en moldes de suflé previamente enmantecados. Hornear a una temperatura de 180ºC y dejarlo cocinar entre 15 a 20 minutos. Al retirar, espolvorear la superficie con azúcar glas.