Julio A. Vargas Jiménez 
ONU llama a priorizar los derechos de salud reproductiva y de las mujeres.
Este domingo se celebra el «Día Mundial de la Población», fecha que desde 1990 quedó establecida como la ocasión en la que la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas busca desarrollar la conciencia sobre las cuestiones de población, incluidas sus relaciones con el medio ambiente y el desarrollo.
Para este 2021, la ONU plantea la necesidad de enfocar los esfuerzos en desarrollar estrategias que fomenten el acceso a la salud sexual y reproductiva a nivel mundial, sobre todo de las mujeres, debido a que este se ha visto mermado en estos dos últimos años por los efectos de la pandemia de la COVID-19.
Según la entidad se espera que para este año haya un aumento de los casos de embarazos no planificados entre las personas de mayor vulnerabilidad social debido a las condiciones de precariedad en los sistemas de salud de los diferentes países, precisamente por los efectos de la COVID.
«Según las investigaciones realizadas por el Fondo de Población de las Naciones Unidas en marzo de 2021, se estima que 12 millones de mujeres sufrieron interrupciones en los servicios de planificación familiar!, según indica una publicación en el portal de ONU.
Además, la ONU indica que a pesar de que en muchos países existen garantías de igualdad de género en el plano general las mujeres tienen solo el 75% de los derechos que tienen los hombres, además revela que entre el 4% y el 29% de las mujeres que utilizan anticonceptivos lo hacen sin que sus parejas tengan conocimiento de esto. Además, que solo el 55% de las mujeres a nivel mundial pueden decidir sobre sus cuerpos y que la violencia contra la mujer se ha visto agravada por la pandemia de la COVID.
«Se prevé que (la población humana) aumente hasta los 8 mil 500 millones para 2030, 9 mil 700 millones en 2050 y 10 mil 900 millones en 2100», ONU.
La ONU también indica que se han registrado cambios notables en las tasas de fecundidad y en la esperanza de vida pasando a comienzos de la década de 1970, de una media de 4,5 hijos por mujer unos 2,5 hijos por mujer en 2015. Mientras tanto, la vida media de una persona ha aumentado de 64,6 años a comienzos de la década de 1990 hasta 72,6 años en 2019.
«Estas megatendencias tienen consecuencias de gran alcance. Afectan al desarrollo económico, al empleo, a la distribución de la renta, a la pobreza y a las protecciones sociales. Asimismo, repercuten en los esfuerzos por garantizar el acceso universal a la atención médica, la educación, la vivienda, el saneamiento, el agua, los alimentos y la energía. Para satisfacer de manera más sostenible las necesidades de las personas, los encargados de la formulación de políticas deben saber cuántas personas viven en el Planeta, dónde se encuentran, qué edad tienen y cuántas personas habrá en el futuro», dice la ONU.
Estos datos está contenidos en el Informe de la Población Mundial 2021, publicado por la Organización de las Naciones Unidas.
