Hoy 
Hoy celebramos el día de Corpus Christi, festividad que tiene lugar el jueves siguiente a la Santísima Trinidad.
Es fiesta de precepto en toda la comunidad católica, por lo tanto es obligatorio ir a misa. Todas las parroquias tienen celebraciones a diferentes horas del día y exposición del Santísimo Sacramento.
Es un día feriado nacional, por eso la arquidiócesis de Santo Domingo anució una eucaristía solemne, presidida por el obispo monseñor Nicolás de Jesús, Cardenal López Rodríguez, en el Faro a Colón, a las cuatro de la tarde a la que está invitada toda la feligresía católica.
Esta fiesta, en la que se venera el cuerpo y la sangre de Cristo, es una recordación, de manera más festiva, de la institución del sacramento de la eucaristía el Jueves Santo y es una manera de honrarla.
Se celebra de manera universal desde año 1264, cuando fue dispuesta por el papa Urbano IV, quien publicó la bula Transiturus, el 8 de septiembre de 1264, que dispuso el día oficial de dicha festividad.
En muchas parroquias se llevan a cabo procesiones. Con anterioridad se llevaba a cabo una gran procesión en Santo Domingo, encabezada por el obispo; pero luego, de unos años para acá, fue sustituida por una Eucaristía solemne que se lleva a cabo en lugares público de mucha concentración, como el Palacio de los Deportes y el Faro a Colón.
El sacramento de la Sagrada Eucaristía. La Eucaristía es el sacramento que contiene verdaderamente el Cuerpo y Sangre de Jesucristo, junto con su alma y divinidad, toda la persona de Cristo vivo y glorioso, bajo las apariencias de pan y vino. El concilio de Trento define claramente esta verdad, fundamental para la vivencia y adoración de Cristo: En el Santísimo Sacramento de la Eucaristía se contiene verdadera, real y sustancialmente el Cuerpo y Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, juntamente con su alma y divinidad. En realidad, Cristo íntegramente.
Como católicos, creemos que Jesucristo está personalmente presente en el altar siempre que haya una hostia consagrada en el sagrario. Es el mismo Jesucristo, verdadero Dios y verdadero Hombre, que andaba por los caminos de Galilea y Judea.
