En el Día Internacional de la Niña, que se celebra hoy, 11 de octubre se centrará en el tema “Con ellas: una generación de niñas preparadas”, marca el inicio de un año en el que debemos conseguir que la comunidad internacional trabaje unida para defender y reclamar la atención y la inversión en las necesidades y oportunidades más apremiantes de las niñas, para que adquieran las competencias necesarias para ingresar en el mercado laboral.
Para ello, la Unicef propone las siguientes medidas:
Cambiar los estereotipos de género, las normas sociales y los prejuicios subconscientes para que las niñas dispongan de las mismas oportunidades académicas y profesionales que los niños.
Mejorar la calidad de la educación y la formación, teniendo en cuenta la perspectiva de género, para que las niñas puedan desarrollar las competencias necesarias para la vida y el trabajo.
Crear escuelas, programas de formación y oportunidades de aprendizaje que sean inclusivos y accesibles para empoderar a las niñas con discapacidades.
Aumentar la participación de las niñas en las disciplinas de ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas.
Crear iniciativas que apoyen la transición de las niñas de la escuela al trabajo, como orientación profesional y prácticas.
Desarrollar programas a gran escala en los sectores público y privado para ofrecer a las niñas formación y desarrollo de competencias adaptadas al mundo laboral.
Facilitar el acceso a financiación y desarrollo empresarial para mujeres emprendedoras.
Por su lado, la ONU indica que hay 1,1 mil millones de niñas en el mundo que desafían el status quo. Están redefiniendo la adolescencia, y lo están haciendo contra viento y marea.
En todo el mundo, las niñas enfrentan dificultades que obstaculizan su educación, formación e ingreso en el mercado laboral. Tienen menos acceso a la tecnología de la información y las comunicaciones y los recursos, como Internet, donde la disparidad mundial entre los géneros está creciendo.
Una cuarta parte de las y los jóvenes, en su mayoría mujeres, están sin empleo o no reciben educación ni formación.
Tan sólo este año, 12 millones de niñas menores de 18 años contraerán matrimonio y 21 millones de niñas de entre 15 y 19 años quedarán embarazadas en las regiones en desarrollo.
Pese a ello, siguen adelante y tienen éxito. Introducen innovaciones en el ámbito de la tecnología para resolver los problemas mundiales, defienden el medio ambiente, alzan su voz contra la violencia y se preparan para presentarse como candidatas.