La mafia que existe con el subsidio de combustibles es más peligrosa que la del narcotráfico, por lo que debe ser eliminado a todo el que lo recibe no solo al sector choferil, que recibe la menor proporción en relación a la totalidad de los beneficiarios.
Así lo considera Juan Hubieres, presidente de la Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción (Fenatrano) y vocero de la coordinadora de Organizaciones del Transporte, quien advierte el interés del Gobierno de perjudicar a los choferes y seguir protegiendo a la “verdadera mafia” que se beneficia del subsidio.
Hoy, durante una reunión en el Maunaloa, las principales organizaciones del transporte de pasajeros y de carga podrían decidir acciones contra la disposición, entre ellas el aumento en los precios del pasaje y de carga, en caso de no llegar acuerdo con las autoridades.
Hubieres dijo que el trato con algunos sectores empresariales es tan especial que importan combustibles amparados en la Ley de Desarrollo Fronterizo 28-01, modificada por la 236-05, pero que esos carburantes luego se desvían a otros lugares, con lo que se comete un fraude y un gran engaño al Estado, que al final se hace de la vista gorda.
Explica que luego estos empresarios vienen a Santo Domingo y legalizan “el fraude” en la Refinería Dominicana de Petróleo, lo que asegura que es del conocimiento del Ministerio de Hacienda.
“Es que se han dedicado a proteger las mafias, desde Hacienda, desde la propia Presidencia, desde determinados estamentos, que no son del Presidente, hasta donde él me pudo demostrar durante la única vez que lo vi”, expuso Hubieres.
Hubieres sostuvo que alrededor del 90% del gasoil que traen para las empresas incluidas en el Desarrollo Fronterizo es desviado hacia Santo Domingo, Santiago, Puerto Plata y el Este del país.
El transportista exige a las autoridades mostrarle al país donde está el desarrollo de las provincias ubicadas en la frontera, a pesar de los privilegios que otorga la citada Ley, ya que siguen cada vez más pobres.