El presidente de la Federación Nacional de Transportistas la Nueva Opción (Fenatrano) Juan Hubieres, exigió ayer al Gobierno devolver a los chóferes del transporte público, que utilizan gas licuado de petróleo (GLP) más de 332 mil millones de pesos, que dijo fueron sustraídos en siete años a los conductores que reciben el bono gas del Precio de Paridad de Importación (PPI).
En rueda de prensa en su local, ubicó la supuesta mafia a partir de la resolución 309 del 9 de septiembre de 2011, consagrada con la 365 del 30 de diciembre de 2015.
El dirigente choferil señala que mientras a los choferes les sustraen, el Gobierno otorga este año combustibles subsidiados a grandes empresas como Odebrecht, sector turismo, mineras, zonas francas y otros, por más de 29 mil millones de pesos.
Explica que las resoluciones como la del 7 de enero de 2013, evidencian el interés del Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes de crear las condiciones para que las empresas importadoras de GLP obtengan volúmenes de ganancias gigantescas en perjuicio de la población.
Afirma en un documento a la prensa, que las resoluciones fueron articuladas de manera tal que sentaran las bases para armar un engranaje que beneficie a la “mafia” vinculada a una empresa importadora y a la Refinería Dominicana de Petróleo.