Juan Hubieres, presidente de la Federación Nacional de Transportistas La Nueva Opción (Fenatrano), afirmó que la solución al transporte en República Dominicana es «llenar el país de carritos concho».

«Hay que masificar el transporte en el país. Este es de los pocos países con carritos concho… La solución para eso es masificarlo. Tenemos que llenar el país», mencionó Hubieres durante una entrevista con el programa «Esto no es radio».

Aseguró que es vital que «en cualquier lugar haya 20 o 30 carritos y 10 a veinte guaguas a disposición de la gente».

Declaró que en el país hay una costumbre de «demonizar como a Putín» a los carritos públicos y que el Estado debe hacerse responsable para el aligerar los tapones que afectan las rutas en la Capital.

OMSA

Criticó al ministro de la Presidencia Lisandro Macarrulla, quien aseveró que el Estado no puede subsidiar la “ineficiencia” y el “mal manejo” que tradicionalmente ha tenido la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA).

Lisandro Macarrulla explicó que estos subsidios significan que el Estado debe pagar entre RD$130 y RD$140 por cada pasajero, lo que catalogó como una “exageración” y un manejo “no racional” de los recursos del Estado.

Hubieres mencionó la propuesta de Macarrulla es «renunciarle al Estado sus obligaciones con el pueblo».

«El ministro decirle a este país que a la OMSA hay que destruirla porque él dice se gasta ciento y pico pesos de subsidio, cuando se gasta ochenta pesos en este momento. Eso es renunciarle al Estado una de sus obligaciones fundamentales con el pueblo dominicano», exclamó.

«No sé el ministro. Pero yo fui estudiante, yo sé lo valen 25 pesos para un estudiante, trabajador o cualquiera que gane por esa cantidad», agregó Hubieres

Sobre los nuevos corredores

Juan Hubieres, reiteró como una estafa, un robo y una mafia, la apertura de corredores en Santo Domingo, cuyo objetivo final, afirma, es el desmantelamiento de la Oficina Metropolitana de Autobuses (Omsa) y entregar el servicio al sector privado.

Afirmó que esos corredores a quienes resuelven el problema es a los personajes a quienes el gobierno regala los autobuses, unas 200 unidades que ya han sido compradas, según dijo sobrevaluadas sobre seis a ocho millones de dólares.