POR LLENNIS JIMÉNEZ
El presidente de la Federación Nacional de Transporte La Nueva Opción (FENATRANO), Juan Hubieres, dijo que ex presidente Hipólito Mejía es quien debería encabezar el expediente en el escándalo del Plan Renove y recordó que entre el año 2002 y el 2003 presentó al ex mandatario alrededor de 30 denuncias de corrupción, incluidas sobrevaluaciones de vehículos entre 1,500 y 5,000 dólares.

Indicó que las sobrevaluaciones encontradas en este programa de distribución de vehículos, avalado por el Estado, fueron depositadas en expedientes en el despacho del entonces mandatario y significaban US$7 millones a favor de quienes administraban el programa.

Informó que cuando le llevó la última denuncia a Mejía manifestándole que se cometería una estafa de 400,000 dólares importando de 75 vehículos y 3,000 piezas a nombre del Plan Renove para una empresa privada, “en presencia de militares de alto rango, me dijo: Tú haces mucho escándalo, Juan. Y acto seguido respondí, sí, lo que pasa es que no quiero caer preso”.

El transportista expresó que agradece a Mejía el apoyo que en su momento le dio, pero que no agradece el hecho de que “no asumiera los intereses del país, por encima de los intereses de sus amigos al frente del Renove”.

Entre los amigos de Mejía que se refirió Hubieres, están Ramón Emilio Jiménez, Johnny Morales y Diógenes Castillo.

La reacción de Hubieres se produce luego de que Mejía señalara que el presidente de FENATRANO fue excluido del expediente de  del Plan Renove por un acuerdo entre Hatuey Decamps y el presidente Leonel Fernández.

Negó la afirmación de Mejía, de que no ha pagado por los vehículos que le entregó el Renove, y aseguró que FENATRANO ha pagado “ciento y pico de millones de pesos por los más de 500 autobuses en manos de sus afiliados”.

Precisó que siempre entendió que ese Plan debía ser un instrumento que sirviera para mejorar la condición de los transportistas, las unidades para los usuarios, con precios razonables, contrario a como se hizo.

Contó que la primera denuncia formulada en el año 2002 al entonces presidente de la República estuvo vinculada con Jiménez, cuyo hijo afirma que importó los últimos 1,000 microbuses denominados garcitas blancas, alegadamente sobrevaluadas en unos 5,000 dólares.

Expresó que eso generó la primera crisis, que dio con una revuelta interna en el proyecto.

Hubieres manifestó el segundo documento presentado a Mejía tenía que ver con una denuncia de que la empresa Hyundai american de Corea, que decía que en República Dominicana venderían 35 millones de dólares, en lugar de los 41 millones de dólares aprobados.

Señaló que nunca recibieron la explicación que públicamente le pidieron del caso a Jiménez, Onéximo González, Castillo, “quienes junto con Antonio Marte manejaban la operatividad del Plan Renove.

Precisó que ante la crisis presentada en el Renove, el presidente Mejía ordenó a Pedro Franco Badía realizar una investigación en la que la comisión determinó que los minibuses Hyundai Contry, de 30 pasajeros, vendidos por el empresario Sam Goodson, por medio de la Hyundai American “estaban sobrevaluados en RD$1,500 dólares”.

Precisó que esta información consta en una carta enviada a Franco Badía y firmada por Marte, Milcíades Amaro y él.

Dijo que unos días después, el 17 de enero, cuando Jiménez y González no estaban en la presidencia del Renove, Goodson le remitió una carta al nuevo presidente del Renove señalando que agregaba 19 minibuses a favor del plan. A su entender, esto se hizo por la sobrevaluación de cada unida en RD$1,500 de dólares.

“¿Qué pasó? Que esos vehículos nunca llegaron al país, a menos que los recibiera el presidente Hipólito Mejía, en su calidad de compadre y amigo de Morales”.

Asimismo, reiteró la denuncia de Goodson no brindó mantenimiento de los vehículos del Renove durante un año, como lo prometió ni entregó las tres ambulancias y los tres talleres móviles para la operación del proyecto, a menos que fueran recibidos por otros.

Dijo que estos servicios tenían una suma superior a los tres millones de dólares. “Hacer oferta de venta y luego no aparecer, eso se llama estafa y cuando en esa estafa se juntan varias personas, se llama asociación de malhechores”.

Aseguró que todas estas denuncias se las formuló a Mejía, a la vez que le señaló una compra de 20 millones de dólares que le iban a hacer a un empresario dominicano, quien se “había negado a pagar comisiones en el Senado para la aprobación, por lo que la venta de las unidades se hizo inviable”.

Expresó que luego, los ejecutivos del Renove negociaron con otra empresa, a la cual le intentaron comprar 2,500 microbuses Kia Master y 487 yipetas Kia para la Policía Nacional, valoradas estas últimas en 18,000 dólares cada una.

Sostuvo que su oportuna denuncia en el periódico HOY evitó la transacción. Adujo que también se pretendía privatizar el cobro de las unidades del Renove, mediante la empresa Caba.