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LA HABANA. AFP. Heridos leves, inundaciones, muros derrumbados, casas y vías destruidas, árboles y tendidos eléctricos caídos dejó ayer, sábado, el huracán Gustav a su paso por el oeste de Cuba, que quedó a oscuras, según los reportes de la Defensa Civil.
El panorama es desolador en pueblos costeros del sur de la provincia de Pinar del Río y en la Isla de la Juventud, por donde embistió el ciclón este sábado con vientos de 240 km/h, así como también en pueblitos del litoral de La Habana, según reportes locales.
Pinar del Río, Isla de la Juventud, La Habana y Ciudad de La Habana, quedaron a oscuras.
«Hasta este momento no tenemos ningún caso reportado de alguien que haya perdido la vida», pero «tenemos varios heridos», declaró Ana Isa Delgado, presidenta del Consejo Municipal de Defensa de la Isla de la Juventud. «Es difícil imaginarlo, es una situación muy compleja, muy difícil, porque los daños son cuantiosos», añadió Delgado, afirmando que algunas localidades de la ínsula están incomunicadas.
Alcalde Ray Nagin ordena desalojo
NUEVA ORLEANS. AP. El alcalde Ray Nagin ordenó ayer el desalojo de Nueva Orleáns, con lo que los pobladores de una ciudad que todavía está recuperándose de la devastación dejada hace tres años por el huracán Katrina deberán huir del inminente azote de Gustav.
Nagin dijo que la recomendación informal de desalojo que ha estado en pie durante días adquiere carácter obligatorio a las 8:00 de la mañana de hoy, domingo, en el lado occidental de la ciudad. Para el oriental, entrará en efecto al mediodía. Asustados por las previsiones de que Gustav se convierta en un huracán de categoría 5, alrededor de un millón de pobladores de la costa del Golfo de México han dejado ya la zona, desde antes de las órdenes oficiales.
Los pobladores abordaron autobuses, trenes, aviones y automóviles, congestionando las carreteras que salen de Nueva Orleáns, con el recuerdo fresco de Katrina, que inundó el 80% de la ciudad y dejó unos 1,600 muertos en la región. Gustav ya ha dejado más de 80 muertos en el Caribe y si las previsiones se cumplen, podría tocar tierra el mañana por la tarde, entre de Texas y el Misisipí.
