Huracán Irene se debilita pero mantienen la alerta en EEUU

Huracán Irene se debilita pero mantienen la alerta en EEUU

Carolina del Norte, EE. UU. (AP) — El huracán Irene se dirigía directamente a tierra el sábado y a pesar de perder fuerza aún amenaza con causar daños incluso antes de tomar una catastrófica ruta por la costa este de Estados Unidos.

El vórtice de la tormenta fue ubicado la madrugada del sábado a 80 kilómetros (50 millas) al sur de Cabo Lookout en los Bancos Exteriores de Carolina del Norte y se seguía desplazando con rumbo norte-noreste a 23 kilómetros por hora (14 millas por hora). Se detectaron vientos sostenidos de tormenta de hasta 108 kilómetros por hora (67 millas) cercanos a los 120 kilómetros (74 millas por hora) considerados como límite mínimo para decretarlo como huracán en Cabo Lookout, informó el Centro Nacional de Huracanes de Miami.

El centro señaló que la velocidad máxima de viento sostenido de la enorme tormenta disminuyó durante la madrugada del sábado de 160 kilómetros (100 millas) a 145 kilómetros por hora (90 millas por hora) pero advirtieron que Irene podría mantenerse como huracán cuando entre a la costa central del Atlántico, pese a perder fuerza tan pronto como entre a tierra. «Los peligros siguen siendo los mismos», señaló el especialista del Centro Nacional de Huracanes, Mike Brennan. «El énfasis en esta tormenta está en su tamaño y duración, no necesariamente en la fortaleza de sus vientos sostenidos máximos», agregó.

Más de dos millones de personas recibieron la orden de desplazarse a lugares más seguros para ponerse a salvo de la enorme tormenta.

Los vientos con potencia de tormenta tropical ya azotaban la costa antes de la llegada de Irene y los vientos y la lluvia dejaron sin suministro eléctrico a más de 80.000 usuarios en la costa este de Carolina del Norte, entre ellos un hospital en Morehead City.

Mientras las bandas exteriores de lluvia y vientos azotaban la costa de Carolina del Norte, causando interrupción de energía eléctrica, las autoridades más al norte pidieron a la gente que se alejara del paso de la tormenta. Funcionarios en el noreste del país, no acostumbrados a este tipo de tormentas tropicales, temían que el sistema llegara a crear una gran devastación.

 «No esperen, no se demoren», indicó el jueves el presidente Barack Obama, quien decidió acortar un día sus vacaciones de verano y regresó a Washington. «Es de la mayor importancia que quienes se encuentren en la ruta proyectada del huracán tomen ya las precauciones pertinentes».

Publicaciones Relacionadas

Más leídas