POR YNDIRA CONCEPCIÓN
Los únicos sobrevivientes dominicanos de la expedición de Constanza, Maimón y Estero Hondo, de junio del 1959, que buscaba derrocar a la tiranía de Rafael Leonidas Trujillo, afirmaron que los ideales por los cuales lucharon aún no se han cumplido, porque «desgraciadamente» los políticos han dado un mal ejemplo.

Mayobanex Vargas y Poncio Pou Saleta señalaron que hoy a 47 años de esa gesta, la sociedad dominicana todavía no ha desarrollado los sectores de la salud, educación ni han reducido el desempleo, ideas que persiguieron ellos y sus compañeros.

No obstante, resaltaron la ejecución de las libertadas públicas.

Vargas manifestó que a pesar de todo, aún quedan gente buena, que no tratan buscar el vivir bien.

Dijo que no pierde la esperanza de que puedan lograr esos ideales, aunque cree que “desgraciadamente los políticos de este país les han dado un mal ejemplo, entonces los jóvenes se preguntan, tantos hombres que se han sacrificado por la libertad de este país y mira cual es el resultado: la burla, el engaño, entonces se echan para atrás».

Sostuvo que en cierto modo la lucha tuvo frutos porque durante la tiranía no se podía hablar con la libertad que se puede hacer ahora.

“Algo se ha logrado, miren la libertad que tienen ustedes de entrevistarme y yo decirle lo que yo quiera, pues aquí sólo había un periódico(El Caribe) y un canal de televisión (La Voz Dominicana, canal 4) y todo era de Trujillo”, recordó el expedicionario.

Vargas fue entrevistado luego de concluir el acto en recordación de los expedicionarios de junio de 1959, que se efectuó en el monumento de los Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo. Entre las personalidades, estaba la viuda de Víctor Manuel Mainardi, expedicionario cubano, doña Mirian Cortázar, que vino al país para participar en el acto. La señora Cortázar dijo que «esto es una epopeya que hay que mantener viva en el pueblo dominicano que costó mucha sangre y sacrificio».

De su lado, Pou Saleta culpó al sistema político y educativo por la ignorancia de muchos jóvenes universitarios sobre esta gesta. Se refirió a una publicación de ayer, en la cual jóvenes universitarios afirmaban ignorar lo que fue la expedición del 14 de junio.

Señaló que ese vacío es como consecuencia de que no se emplean los recursos debidos en la educación, sino que se gastan el las cajitas y funditas con fines clientelitas.

Mientras el presidente de la Fundación Héroes de Constanza Maimón y Estero Hondo, Porfirio Rodríguez dijo que «gracias a estos hombres tenemos una sistema democrático funcionando, lleno de lacras y de problemas, pero que tenemos que superarlos y que dentro de la democracia tenemos que lograr todas las metas que están en agenda».

Max Puig, secretario de Medio Ambiente y presidente del Partido Alianza por la Democracia, manifestó, luego de depositar una ofrenda floral, que de los ideales por los cuales lucharon los expedicionarios de junio del 59, todavía quedan materias pendientes.

Citó entre los aspectos faltantes por cumplir en el plano económico y social,la eliminación del analfabetismo, «que a 47 años de la gesta, todavía la República Dominicana tiene una cifra de analfabetos totales que supera el 15 por ciento y funcionales que es más elevada; un programa de seguridad social que le garantice a cada dominicano la salud, la educación y la vivienda, y que como todos sabemos estamos muy distantes de haberse alcanzado”.

Dijo también que es necesario la ampliación del mercado interno y la eliminación del desempleo.

Señaló que parte de estos problemas son herencia de la tiranía como la Liga Municipal Dominicana, que creó Trujillo para controlar los Ayuntamientos.

Durante el acto de conmemoración diversas organizaciones depositaron flores en el monumento, entre ellas, Campaña Dominicana Solidaridad con Cuba, Comisión Permanente de Efemérides Patrias, Alianza por la Democracia, Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Partido de los Trabajadores Dominicanos (PTD), Secretaria de Cultura entre otras.

La expedición de 1959

La expedición antitrujillista de junio de 1959 desembarcó por Constanza y por las playas de Maimón y Estero Hondo.

El grupo de luchadores antitrujillistas que efectuó este hecho heroico, fue entrenado militarmente en el campamento guerrillero ubicado en la finca «Mil Cumbres», de la provincia cubana de Pinar del Río.

La gesta fue organizada por el Movimiento de Liberación Dominicano, con el concurso de los gobiernos Venezuela y Cuba.

Enrique Jiménez Moya, comandante en jefe del Ejército de Liberación Dominicana, arribó al país el 14 de junio de 1959, a las 6:21 de la tarde, en un avión pintado con las siglas de la Aviación Militar Dominicana. El aterrizaje se produjo en el aeropuerto militar de Constanza, una ciudad enclavada en las montañas.

En el avión, piloteado por el venezolano Julio César Rodríguez y el expedicionario dominicano Juan de Dios Ventura Simó, ex capitán de la Aviación Militar Dominicana, vinieron cincuenta y seis combatientes. El aparato emprendió vuelo después de dejar en tierra a los expedicionarios. El piloto venezolano condujo el avión en su viaje de regreso.

El arribo del avión se había coordinado con la llegada simultánea de lanchas que conducían a los demás expedicionarios, pero se presentaron inconvenientes que retardaron el desembarco marítimo hasta el 20 de junio. En esa fecha, arribó al país por Maimón la lancha «Carmen Elsa», comandada por el doctor José Horacio Rodríguez. Ese mismo día desembarcó en la playa de Estero Hondo, la nave «Tinina» con José Antonio

MAYOBANEX VARGAS: Testimonio de un sobreviviente, Crónica de una vida salvada

Mayobanex Vargas, uno de los más jóvenes de los expedicionarios con 23 años para la época, aseguró que salvó la vida de forma milagrosa.

Dijo que después de hacerse entregado a los militares en la provincia de Bonao, fue trasladado a la que hoy es la Base Aérea de San Isidro, donde había un sistema para torturar, interrogar y después llevar al prisionero al paredón.

“A mí me iban a fusilar, después que me torturaron, me preguntaban si yo soy católico, le digo que sí y me preguntan que si me quiero confesar, le digo que sí, porque esa es la única oportunidad que le dan a un prisionero de guerra para después llevarlo al paredón”, narró

Señaló que después de torturado e interrogado le mandaron un sacerdote, que no me trató muy bien, y decidí no confesarme.

Agregó que después que el sacerdote se va, estoy esperando que me vengan a buscar para llevarme al paredón, pero cuando estoy esperando que en cualquier momento me lleven al paredón, aparecieron los dos periodistas americanos del New York Times.

“En eso, añadió, cuando Mélido Marte me está interrogando, mandan los dos periodistas a decir que quieren hablar con los prisioneros y Mélido Marte le mandó a decir, dígale a esos gringos que aquí no hay prisioneros”.

“Yo no sé como esos periodistas llegaron tan rápido allá, porque si llegan 15 minutos antes no me encuentran, me hubieran fusilado”, dijo.

Sostuvo que como los periodistas pertenecían al New York Times, que era un periódico que Trujillo no pudo comprar ni tener acciones, “entonces ellos fueron exigiendo que querían verme, me interrogaron me sacaron herido, y los guardias me preguntaron qué yo le iba a decir a los periodistas y yo les dije, bueno que me caí por la montaña”. “Pero ya ellos sabían que me habían golpeado, me tiraron unas fotos, que anduvieron por el mundo entero como prisionero de guerra”, relató.

Vargas señaló que gracias a Dios y a la presencia de esos dos periodistas “estoy hablando con ustedes».