GUATEMALA (EFE).- La Iglesia católica de Guatemala advirtió ayer que el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Centroamérica y EEUU traerá consecuencias peligrosas para los pequeños productores agrícolas de este país.

   En un comunicado difundido ayer, la Conferencia Episcopal de Guatemala (CEG) señaló que el Gobierno debe poner en marcha medidas de protección para los pequeños productores agrícolas y población vulnerable en general, debido a que se verán afectados por el TLC.

   «Nos preocupa la situación de disparidad en que pueden encontrarse los pequeños y medianos productos de granos básicos», señaló la CEG.

   «Los pobres y marginados deben ser protegidos mediante apropiadas tutelas legales, como lo pedía a los responsables de los pueblos el Papa Juan Pablo II en su primera vista a nuestro país» en 1982, agregaron los obispos.

   El TLC entre los países de Centroamérica y EEUU, fue suscrito en Washington en mayo del año pasado; meses después se adhirió a él la República Dominicana.

   Los parlamentos de El Salvador y Honduras, así como el de la República Dominicana, se han adelantado al resto de países de la región y han ratificado ya el tratado comercial.

   En Guatemala, las masivas protestas protagonizadas la semana pasada por sectores opuestos al tratado, obligó al Parlamento a postergar por al menos una semana la votación sobre su ratificación, algo que se da por seguro debido al apoyo mayoritario que tiene.

   En declaraciones a medios locales, el viceministro guatemalteco de Economía, Enrique Lacs, dijo hoy que el gobierno coincide con las apreciaciones de la Iglesia católica sobre que «hay que hacer una agenda para minimizar los efectos negativos» del TLC.

   Además, aseguró que el Gobierno trabaja en un programa alterno que pondrá en marcha para beneficiar principalmente a los pequeños productos agrícolas que puedan verse afectados por el TLC.

   Diversos sectores del movimiento social guatemalteco acusaron ayer, viernes, al Parlamento de «negarse a escuchar el clamor del pueblo en contra del TLC», y convocaron a un paro nacional indefinido para la próxima semana.

   Las organizaciones exigen al Parlamento que convoque a un referendo antes de ratificar el TLC, para que la ciudadanía opine si esta a favor o en contra del mismo.

   Sin embargo, los bloques mayoritarios del Parlamento han rechazado esta petición por considerarla innecesaria.