La Iglesia Católica renovó y actualizó ayer el sermón que hace 500 años pronunció Fray Antón de Montesinos,  con un llamado al Gobierno, a los empresarios y a toda la sociedad,  para que se respeten los derechos humanos, la vida,  la dignidad de las personas y haya acceso  a  viviendas, a la salud, a la educación y al trabajo. Durante una misa en la  Catedral,  concelebrada por varios obispos y sacerdotes,  la Iglesia plantea que hoy como ayer no se queda solo en el templo y eleva su voz como lo ha hecho en muchas ocasiones a favor de la gente.

La Iglesia Católica renovó y actualizó ayer el sermón que hace 500 años pronunció Fray Antón de Montesinos,  con un llamado al Gobierno, a los empresarios y a toda la sociedad,  para que se respeten los derechos humanos, la vida,  la dignidad de las personas y haya acceso  a  viviendas, a la salud, a la educación y al trabajo.

Durante una misa en la Catedral,  concelebrada por varios obispos y sacerdotes, en  la clausura de los 500 años del sermón de Montesinos, la Iglesia plantea que hoy como ayer no se queda solo en el templo y eleva su voz como lo ha hecho en muchas ocasiones a favor de la gente.

Monseñor Ramón de la Rosa y Carpio, arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago, encabezó la eucaristía organizada por la Pastoral Social y en la homilía dijo que la Iglesia ha sabido denunciar los males, como lo hizo con Rafael Leónidas Trujillo, sin dejar por ello de  tener relaciones con el Estado dominicano.

El religioso explicó que en la carta pastoral del 27 de febrero pasado se expusieron 17 puntos en forma de preguntas que denuncian lo que para la Iglesia son los principales problemas del país, evocando a Montesinos.

Indicó que el sermón de Montesinos marcó el camino para la defensa de los desposeídos, basado en la fe y el compromiso con el hermano.

“Hay que hacer las cosas en comunidad, no somos una voz que clama en el desierto, queremos cambiar la sociedad, como decía Montesinos, con el trabajo de la Iglesia en distintas áreas”, preciso.

Se preguntó qué sería de la sociedad sin el trabajo social de la Iglesia en áreas como la salud, la educación, el trabajo con los pobres, el medio ambiente y demás.

Solución en la Junta.  Entrevistado luego de la misa, monseñor de la Rosa aseguró que  habrá  una solución al conflicto en la Junta Central Electoral.

Dijo que se creía que esa era una etapa superada, pero al parecer no, y pidió a monseñor Agripino Nuñez Collado  que no se canse, y con la paciencia que le caracteriza, continúe mediando para que haya una solución.

“Yo tengo una infinita confianza en el pueblo dominicano y creo que así como hemos salido de muchos males en otra época, incluido problemas en la Junta Central Electoral, tambien vamos a salir ahora airosos.

Insistió en que el problema se solucionará antes de mayo  porque tiene que haber elecciones.

Los concelebrantes

Además de monseñor de la Rosa, estuvieron en la celebración el nuncio  Jósef Wesolowski; los  obispos de Puerto Plata,  Julio César Corniel; de San Juan, José Dolorez Grullón; de San Francisco, Jesús Maria de Jesús Moya; de La Vega, Antonio Camilo;  de Baní, Freddy Bretón; los auxiliares Amancio Escapa, Pablo Cedano, Valentín Reynoso y varios sacerdotes dominicos y  de diferentes diócesis del país.