POR ODALIS MEJIA
La Iglesia Católica propuso ayer que  las fiestas de carnaval del 2008 se realicen antes del día seis de febrero cuando inicia la Cuaresma, por lo que deberían llevarse a cabo los días tres, cuatro y cinco de febrero, tal como se celebra en todo el mundo, de acuerdo al obispo de Barahona, Fabio Mamerto Rivas.

Monseñor Rivas apuntó que el próximo miércoles seis de febrero se inicia la Cuaresma que abarca 40 días y tiene un significado sagrado para los dominicanos como un “tiempo de reflexión, conversión y preparación a la fiesta de la Pascua”.

Recordó que las fiestas patrias son la conmemoración de “nuestros logros como pueblo”, mientras que el carnaval en cambio, es una fiesta que se celebra los tres días anteriores al miércoles de Ceniza y que tiene el carácter de un desahogo previo a la austeridad de la Cuaresma.

Mientras que en relación  a la fiesta de la Independencia Nacional, o sea el 27 de febrero, consideró que no debe ser utilizada para fiestas carnavalescas, ya que en ese sentido se ha venido creando confusión, opacando con el carnaval, las celebraciones patrióticas.

“Es de suma importancia que se siga insistiendo a nivel del pueblo y de las autoridades la no existencia de correlación entre carnaval y fiestas patrias” expresó monseñor Mamerto Rivas en rueda de prensa junto al coordinador de la Pastoral Juvenil, padre Luis Rosario.

Ponderó como positivo el reciente diálogo que promovió la Secretaría de Cultura entre la Iglesia Católica y otras instituciones para discutir el tema de la separación de las celebraciones, pero lamentó que de esa reunión no surgieran soluciones concretas, por lo que el esfuerzo que se está haciendo puede perderse.

La propuesta de la Iglesia Católica para la separación de fiestas sugiere que para el 2009 la fiesta de carnaval  sea celebrada desde el 22 al 25 de febrero, y para el 2010 del siete al 10 de febrero.

En otro punto, monseñor Rivas señaló que entre las prioridades del Gobierno para el próximo año está reorganizar la inversión pública de forma que los recursos vayan a los más necesitados, ya que “es realmente impactante ver los derroches del dinero sin que se vaya en provecho de la población”.

Pidió además prudencia en estas fiestas de año nuevo y evitar los excesos  para que no “hayan tantas loqueras en nuestro ambiente y en la sociedad que repercuten y van dejando un remanente de falta de esperanza y de fe”.

ROSARIO

Mientras que el padre Rosario valoró el mensaje del Papa Benedicto XVI que, con motivo de año nuevo,  ha llamado al mundo al desarme y desmilitarización.