La Iglesia Católica informó ayer que suspendió de manera cautelar al sacerdote al que familiares de una adolescente acusaron de abuso sexual en Sabana Grande de Boyá, Monte Plata.
En un comunicado, el Arzobispado de Santo Domingo afirmó que abrió una investigación sobre las actuaciones del cura José Rosario González.
Dijo que el 15 de mayo de 2018 comunicó la situación a los padres de la menor y ese mismo día a la Procuraduría General para que procediera con las medidas pertinentes.
“El Arzobispado tal y como amerita en estos casos, ha estado colaborando con el Ministerio Público en las investigaciones de lugar”, asegura la entidad en su comunicado.
Explicó que la suspensión es en virtud del Código de Derecho Canónico.
Expuso que el caso es tratado por la Comisión de Protección al Menor que creó a principios de año para atender todas las denuncias sobre abuso sexual de menores y personas vulnerables por parte de miembros del clero.
El Ministerio Público acusó al religioso de abusar de la muchacha, que asistía a la parroquia La Candelaria, donde oficiaba.