Las iglesias evangélicas conmemorarán la Semana Santa con una serie de actividades encaminadas a la reflexión y entrega al Señor. No tienen un programas de celebración específicos, pero dentro de sus actividades se encuentra la evangelización y la predicación de mensajes alusivos a la muerte y resurrección de Jesucristo.
El presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue), Fidel Lorenzo explicó que en las últimas décadas la comunidad evangélica se ha ido acercando con mayor frecuencia a las actividades relacionadas con la Semana Mayor, producto de una compresión más amplia del significado que tiene la época para el mundo.
Entendiendo la realidad, la iglesia se ha ido involucrando en acciones alusivas a la Semana Santa, iniciando sus actividades con el Domingo de Ramos, que es donde se conmemora la entrada triunfal de Jesús a la ciudad de Jerusalén.
“En dicha actividad los cristianos destacamos los valores y principios enseñados por el Maestro; nosotros no recreamos los rituales en sí, sino que tomamos las enseñanzas para hacer una reflexión de ellas”, manifestó.
Para la iglesia la Semana Mayor se ha convertido en una temporada para buscar a Dios, y dedicar tiempo a la familia. Este tiempo es para aceptar a Cristo como salvador, enseñar el perdón y estar en paz con el Dios, no solo una semana sino todos los años.
Mientras, el pastor Neftalí Pérez, encargado del Ministerio de Arte del Concilio Nacional Evangélico de las Asambleas de Dios, dijo que durante la Semana de Santa, la comunidad pentecostal celebra la resurrección de Jesucristo.
“En esta semana se hacen retiros espirituales, campamentos y una serie de actividades encaminadas a la comunión y consagración del alma a Dios”, explicó.
El pastor indicó que la orientación a los feligreses de la congregación consiste en incentivar un acercamiento espiritual y un recogimiento de las cosas “mundanales”.
“Este tiempo ha sido tomado por el mundo como una semana de diversión y gozadera, pero nosotros orientamos a la gente a la reflexión”, sostuvo Pérez.
Las actividades de la iglesia culminan el Domingo de Resurrección con una “Santa Cena” conmemorativa al cuerpo de Cristo.
Ambos religiosos coinciden en que el país necesita buscar más a Dios en esta época cargada de corrupción, impunidad, criminalidad e injusticia social.
Manifestaron que se debe buscar al Señor en “este tiempo que aun puede ser hallado” y que la República Dominicana necesita de un encuentro con él.
“La vida religiosa sin la esperanza de salvación no tiene sentido”, concluyó Lorenzo.