Las iglesias evangélicas son instruidas en la “Gestión Eficiente y Transparencia de las Finanzas”, con la advertencia de que deben reportarle al Estado todas las donaciones y aportes que reciben superior a los 10 mil dólares, para que no sean acusadas de beneficiarse de las actividades de lavado de activo.
La labor la realiza la Cooperativa de la Asociación para Inversión y Empleo Incorporada (Coop-Aspire), una entidad que agrupa a varias iglesias, a las que ayer les impartió el seminario con el tema central “Prevención del lavado de activos en las iglesias”, a cargo de Dulce Luciano, directora de la Unidad de Análisis Financiero del Comité Nacional Contra el Lavado de Activos. Participaron pastores, tesoreros y líderes de estas iglesias, en todo el país. El evento fue en el hotel Barceló, de esta ciudad.
Gerardo Orozco, gerente general de Coop-Aspire, entidad que da soluciones financieras, llamó a las iglesias eviten recibir dinero que no sea de fuentes adecuadas, administrando las finanzas de manera óptima y haciendo los reportes a las instituciones gubernamentales, para evitar el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.
Expresó que muchas veces, las iglesias están compuestas por personas humildes, que de repente empiezan a manejar una cantidad de dinero y no conocen que la ley establece previsiones para evitar el lavado de activos, y que hay reportes que se deben presentar. Señaló que Coop-Aspire, con más de 30 años en el mercado, comparte sus experiencias y que este sector crece en número e ingresos. “Compartir con líderes sobre cómo registrar los fondos, administrarlos, de manera que honre a Dios y que sea de testimonio para toda la comunidad”, dijo.