El Instituto Global de Altos Estudios en Ciencias Sociales (Iglobal) celebró ayer la V Graduación Ordinaria de los programas de maestrías y estudios de postgrado que desarrolla, donde 110 profesionales recibieron sus títulos.

Dentro del grupo figuraron los jueces Jottin Cury, del Tribunal Constitucional; y Francisco Ortega, de la Suprema Corte de Justicia.

En el acto recibieron sus titulaciones 19 graduandos del máster en desarrollo urbano y territorial sostenible; 25 del máster en alta dirección pública; 32 del máster en derecho de la administración del Estado y 15 del máster en relaciones internacionales.

Además seis alumnos del máster en ciencia política para el desarrollo democrático, seis del máster en derecho constitucional y libertades fundamentales y siete de la especialidad en pensamiento complejo, ciencias de la complejidad y teoría del caos.
Las maestrías, algunas de doble titulación, se desarrollan en coordinación con la Universidad de Salamanca y el Instituto Universitario de Investigación Ortega y Gasset (IUIOG) de la Fundación José Ortega y Gasset-Gregorio Marañón. De Francia, la Université Paris 1 Panthéon-Sorbonne.

En el acto el miembro del Consejo de Regencia de Iglobal e invitado de honor, Manuel Corripio, hizo una reflexión a los graduandos sobre las situaciones que llevan a que las profesiones se separen del compromiso social.

Corripio explicó que normalmente las personas tienden a pensar que todo lo que logran es producto de su propio esfuerzo, dejando de lado que las condiciones que encontraron para lograr ese objetivo fueron creadas por otros.

“Vemos un mundo académico que prepara a los profesionales con un enfoque excesivo en una sola idea, que le produce estrechez y pienso que obedece un poco a que hay una única métrica de juzgar el éxito: el económico. Se produce y se genera riqueza se es exitoso, si no se produce riqueza, no se genera, no se considera exitoso”, analizó a modo de reflexión.

Dijo que se necesitan personas con pensamiento crítico y visión holística, así como flexibilidad y capacidad de adaptación.

“Se requieren profesionales que logren ese vínculo entre su conocimiento, la sociedad y la técnica de manera que todo funcione en armonía”, expresó en el acto que se realizó en la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña.