POR E. RUBENS
El Centro de Biotecnología Vegetal (Cebive), del Instituto de Innovación en Biotecnología e Industria (IIBI), anunció el cultivo masivo de tejidos vegetales para enfrentar este año la sigatoka negra, enfermedad que diezma la producción de plátano y guineo, cultivos de gran consumo y de exportación en el país. 

Julio Mejía, especialista del Cebive, expresó que “con el avance de la sigatoka negra en el país y los diversos problemas producidos por otras plagas y enfermedades, el cultivo de plátano y guineo se hace cada vez más difícil y costoso”.

Dijo también que el plátano que produce el país va dirigido básicamente al mercado local, ya que es un elemento importante en la canasta familiar, pero que “en el caso del guineo, éste se presta más para el mercado internacional, sobre todo, de gran importancia el denominado banano orgánico, del cual se exporta a mercados europeos, entre otros, y goza de mejores precios”.

Indicó que por el avance de las plagas y enfermedades, se hace prioritario disponer de material de calidad y de variedades resistentes o tolerantes a plagas y enfermedades.

Mejía señaló que el Cebive dispone de la tecnología adecuada para la propagación masiva de plátano y guineo mediante la técnica de cultivo de tejidos vegetales, propagando guineo con calidad y características demandadas por los productores nacionales.

Expresó que en cuanto a los plátanos se propagan masivamente las variedades locales “Macho por hembra” verde y morado, “Macho”, “Liborio” y otras tolerantes a la sigatoka negra, como la variedad de plátano FHIA-21.

Destacó que la variedad FHIA-21 se perfila como uno de los paliativos ante el avance progresivo de la sigatoka negra en el país, y por ser esta variedad de interés en la producción de plátano, se le ha dado especial importancia en la propagación in vitro en el IIBI.

Explicó que estos materiales pueden ser adquiridos por los productores en instituciones del sector agropecuario para sus programas de producción a nivel nacional.

Hizo notar que los clones locales no son tolerantes a la sigatoka negra, por lo que hay que continuar preparándose para hacerle frente a esta enfermedad.

Además de propagar materiales vegetales con características como las que posee el FHIA-21, el IIBI resaltó que la técnica de cultivo de tejidos que impulsa el Cebive también ayuda a que las plantas producidas recobren su vigor genético y, por tanto, recuperen su productividad, condición que no es posible lograr con otro sistema de producción de material de siembra, como la cepa tradicional, microcormos, entre otros.

Mejía manifestó que en el caso de las musáceas, las plantas propagadas por cultivo de tejidos aventajan a los sistemas tradicionales en una mayor sincronización en la emisión del racimo, incremento de peso y disminución del ciclo vegetativo, lo que se convierte en ganancia para el productor.

Señaló que el IIBI está preparado para enfrentar los retos en la propagación masiva de plátano y guineo, como una manera de ayudar a la sostenibilidad, rentabilidad y competitividad de estos importantes productos de gran consumo en el país.