La magistrada Carmen Imbert Brugal, miembro del pleno de la Junta Central Electoral, inició hoy su participación en la misión internacional de observación electoral de la Unión Interamericana de Organismos Electorales (UNIORE), en las elecciones de Ecuador que tendrán lugar el próximo domingo 19 de febrero.

En adición a las labores de observación que se desarrollarán hasta el próximo lunes, Imbert Brugal tuvo una disertación en las sesiones de trabajo de las mujeres que forman parte de dicha misión, bajo la iniciativa denominada Magistradas Electorales, en las cuales se analizaron retos y avances de la participación de la mujer en la política, así como las dificultades que persisten en el ejercicio del voto femenino en los procesos electorales.

Como parte de la misión especial, dicho grupo de magistradas y funcionarias de organismos y tribunales electorales de la región estarán evaluando a través de un informe aspectos como la inclusión de las mujeres en las propuestas de campaña, la exposición en los medios de comunicación de las mujeres candidatas, la situación de la mujer en los recintos electorales y durante la votación, así como la presencia de mujeres como parte de la integración de las juntas electorales.

Voto de la mujer en RD. Imbert Brugal recalcó que a pesar de que en República Dominicana se consagró constitucionalmente el derecho al voto de la mujer hace ya 75 años, se mantienen muchos retos para alcanzar una participación equitativa de mujeres y hombres en los procesos electorales y en las funciones públicas en general.

«Logramos que la Constitución nuestra consagrara la igualdad, pero además tenemos leyes específicas e incluso una resolución de la JCE que hace obligatorio el cumplimiento de la cuota de la mujer. Sin embargo, los partidos se las ingenian para no cumplir”, dijo.

Como parte de los avances en República Dominicana, señaló las múltiples normas constitucionales, legales y regulatorias que buscan proteger y propiciar la participación política de la mujer, aunque a su entender “a veces nos regodeamos con los logros y nos olvidamos de la praxis, de lo práctico.”

En ese sentido, destacó como ejemplo que la opinión continua de mujeres con perspectiva de género, entre las que se incluyó, ha logrado cambios importantes en la dinámica electoral y política de la República Dominicana.

La magistrada hizo el llamado de que “llegó el momento de olvidarnos de aquello que decían las feministas en los años 70: que las mujeres somos hermanas y enemigas. Debemos partir de que sí podemos hacer los cambios de nuestros países. Ese es el reto, porque somos mujeres ya maduras, con experiencia de estado en distintos estamentos.”