Los Mets vuelven a ser el equipo chiquito de Nueva York
No es un secreto que para mucha gente en Nueva York solo hay un equipo: Los Yanquis.

Sin embargo, es bueno decir que al menos por dos o tres temporadas, los Mets pasaron a ser un equipo grande, al menos en el papel.

Lo fueron porque firmaron a los mejores peloteros latinos estrellas disponibles en el mercado.

La suerte no estuvo de su lado.

Peloteros como Pedro Martínez, Moisés Alou, Luis Castillo, Johan Santana, Francisco Rodríguez, Carlos Beltrán, en fin, todo el mundo, se lastimó y no rindió al máximo.

Luego de la partida de casi todos esos peloteros, de la salida de Omar Minaya y ahora de su última estrella José Reyes, el panorama luce feo.

Primer paso negativo: un recorte drástico en la nómina.

Tienen 53 millones de dólares menos en pagos, y su prespuesto bajó de los 100 millones.

Eso golpea directamente las posibilidades del club, porque con menos peloteros de calidad, son menos las posibilidades de ganar un campeonato.

Miren este reporte:

Luego que dejaron que José Reyes se fuera a Miami sin hacerle una oferta concreta, el agente Scott Boras se burló al decir que los Mets ya no compran en la sección de carnes del mercado, sino en la de los vegetales.

Asfixiados por problemas económicos y con niveles de concurrencia a su estadio en picada, los Mets encaran otra campaña sombría.

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