Con las partidas de Nick Leyva y Dino Ebel la dirigencia de los equipos de la pelota invernal ha recaído en el personal del país.

Me refiero a Manny Acta (Licey), Bonny Castillo (Escogido), Rafael Ramírez (Estrellas), Félix Fermín (Aguilas), Luis Silverio (Toros) y Miguel Diloné (Gigantes).

Eso muestra que los dueños de equipos están perdiendo el temor a tener a dirigentes locales. Se decía que los peloteros no los respetaban.

Sin embargo, eso ha cambiado ya que la mayoría de estos nuevos dirigentes son coach en Grandes Ligas y eso obliga a que se les respete.

Hay gente que piensa que los dirigentes locales conocen más la Liga y a los peloteros y que deberían tener más trabajo en el torneo.

Naturalmente, como la misma autoridad y respeto que a los norteamericanos. Ojalá y se siga avanzando en eso, ya de aquí salieron Felipe Alou y Tony Peña.

¡Muy buena medida!

[b]Manny Acta debe ser más agresivo[/b]

El Licey podría tener el equipo más talentoso del torneo, pero hay algo que preocupa.

Sin querer cuestionar la calidad como dirigente de Manny Acta, en ocasiones se le observa en el «aire» a la hora de tomar algunas decisiones.

Eso es peligroso cuando se juega en una liga tan complicada, corta y donde hay otros rivales buenos y que capitalizan los errores.

Acta debe «afinar» la puntería porque es mejor corregir cosas ahora y no lamentar a finales del mes de febrero, si el equipo colapsa.

[b]Diloné, José Parra tiró demasiado[/b]

Miguel Diloné, el favorito para «Manager del Año», no debió dejar el pasado viernes a José Parra que tirara tres entradas en relevo ante Licey.

En el tercer inning lucía cansado y por eso perdieron por una transferencia que forzó la carrera del triunfo para el equipo Azul.

No sé si fue una decisión basada en que venían tres días libres, pero teniendo a tanta gente no se le podía dar tanto trabajo a Parra.

[b]Los Toros lucen mejor para clasificar[/b]

Parece que la lucha por el cuarto lugar estará entre Estrellas y Azucareros. Se ven mejores los Toros para avanzar hasta el «round robin».

Han logrado tomar un «segundo aire» después de dominar a las Aguilas y al Escogido y luce que se han reagrupado como a inicio de campaña.

El dúo Silverio-Peguero deberá hacer ajustes finales que garanticen que finalmente podrán colarse entre los primeros cuatro equipos.