En Nueva York no importa que tan grande seas, sino qué  haces para que Nueva York sea más grande.

Alex llegó a los Yanquis como el mejor jugador, y hasta el trono lo perdió de manos de Albert Pujols.

En playoffs ni hablar, un fracaso total.

Sin embargo, en el 2009 está cantando otro gallo y Alex rinde como los grandes en NY.

El hombre está bateando en el “clutch”, empata y decide juegos.

Ese es el Alex que gana 33 millones de dólares.

Le comentaba a un grupo de amigos que cuando alguien hace algo grande en Nueva York, su figura se triplica.

Hoy en Nueva York nadie habla de todas las novias de Alex,  de los esteroides ni de los bares.

Es más, hoy el que hable mal de Alex en Nueva York lo pican.

Confieso que me alegra ver triunfar a Alex con los Yanquis.

Felipe Payano ha hecho historia en Sedefir

Dicen, dicen, que el Ministro Felipe Payano se va de la Sedefir.

Que ahora será Senador de San Pedro de Macorís.

Que Payano se vaya de Sedefir será un “dolor de cabeza” para muchos deportistas.

Lo será porque la obra de Payano en Sedefir es “inmensa”.

No hay un deportista que pueda decir que Payano no le apoyó.

Si finalmente se va, podrá estar tranquilo, ya que su obra tendrá un valor inolvidable. Quienes lo reconozcan serán justos, los que se nieguen a aceptarlo, sencillamente serán mezquinos. Y de esa gente está lleno mundo.