El trabajo de un gerente es propiciar el mejor camino al éxito.
Si con jugadores como Yamaico Navarro y Juan Francisco las cosas no están saliendo bien, entonces debían cambiar las estrategias.
Cuando el Licey adquirió a Pedro Severino fortaleció la receptoría junto a Micahel de la Cruz y Wellington Castillo.
Al cambiar a Francisco, ahora tienen la posición de bateador designado para Yermin Mercedes, Domingo Santana y Yeison Asencio. Junior Noboa se dio cuenta que el Licey puede lucir mejor con jugadores versátiles como Rossel Herrera, los Bonifacio, Sergio Alcántara, Pablo Reyes y Erick Mejía, entre otros.
Jorge Bonifacio aporta poder y probablemente recibirá respaldo con otro importado.
El nuevo mánager Luis Sojo recibirá un equipo más joven, rápido y que pueda aplicar el “Juego pequeño”. En los últimos tres años, el Licey apeló a esperar los grandes jonrones de Juan Francisco, pero no siempre llegaron.
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