Hoy 
FRANKLIN MIRABAL
Me extrañó escuchar de labios de Santana Martínez el informe de que Bartolo Colón no aparece.
Yo creo, y pienso que es el comentario generalizado, que es a Colón a quien le conviene lanzar en RD.
Colón confrontó problemas en el hombro y parece que no operarse en el primer momento, le ha hecho daño.
Estuvo cuatro años en Anaheim, dos buenos y dos malos.
En las primeras dos temporadas, ganó 39 juegos, incluyendo 21 en el 2005, cuando se llevó el Cy Young.
Pero en los últimos dos años, apenas ganó siete partidos.
Un obstáculo grande que tiene Colón es su salario. En el 2007, devengó 16 millones, y es casi seguro que eso bajará mucho.
No creo que nadie le de más de 5 millones, siempre y cuando lo vean en buena forma en RD.
De todas formas, el primer paso es que Colón se deje ver y si está saludable aparecerán muchos equipos para firmarlo.
Que alguien lo llame, le aconseje que tire con las Aguilas, porque entonces se pensaría que no está en capacidad ni de tirar en la pelota invernal de RD.
Y que está acabado.
Por fin, harán otro play en RD
Con el anuncio de la Liga de Béisbol de que ha solicitado ser sede de algunos de los juegos del Clásico Mundial del 2009, se da como un hecho de que por fin tendremos un nuevo estadio Quisqueya.
Yo me imagino, que antes de hacer esa petición, se agotó el siguiente procedimiento:
1- Aval del Gobierno.
2- Consentimiento del mismo Gobierno para de una vez y por todas entrarle al estadio Quisqueya.
y 3- Seguro que se habló del precio de las boletas, porque serían muy caras para los fanáticos.
Según dice la Liga, en Estados Unidos ven con muy buenos ojos ese montaje en RD, ya que nuestro país es uno de los mayores productores de peloteros para las Grandes Ligas.
Si finalmente lo vamos hacer, hay que comenzar a trabajar desde marzo del 2008.
Ya se hizo un intento, y lo único que se vio fue un tremendo agujero por el lado derecho del Quisqueya.
Confieso que estoy contento.
Gracias al Clásico Mundial, por fin, vamos a tener un estadio a la altura de nuestros jugadores.
