FRANKLIN MIRABAL
Hemos recibido el reporte de que los Rays de Tampa le ofrecieron a Carlos Peña un contrato de tres años y 30 millones de dólares.

Si yo fuera Peña, le tumbo de las manos ese contrato a Tampa.

Usted no se imagina todo el trabajo que ha pasado Peña para establecerse en las Grandes Ligas.

Con 29 años de edad, tiene todo el tiempo por delante para ganar el dinero que aspire.

Debe firmar por tres años y 30 millones de dólares. Que no se deje llevar tanto de Scott Boras para que luego no tenga que dar marcha atrás como hizo Alex Rodríguez con los Yanquis.

Es cierto que con 46 jonrones justificó ganar hasta 15 millones de dólares, pero qué garantías existen de que pueda repetir esos números.

Yo diría que tendría que dar 50 jonrones para elevar más sus bonos.

Que firme, que a los 32 años, podría seguir en buena posición para lograr otro pacto más largo y grande.

Un cambio bueno, pero…

 Fue ejecutado oficialmente el cambio.

Ahora bien, ese cambio de Rafael Furcal por Wily Mo Peña va a traer muchos comentarios.

De un lado, yo apoyo que el Escogido salga de un pelotero que se negaba a jugar con ellos.

Esto así, porque ahora podrán contar con un pelotero como Wily Mo, que si juega, puede ser diferencia.

Ahora bien, se sienta un mal precedente, a juicio de  algunos, cuando se complace a un jugador de esa manera. Es decir, ahora todo el que sea de Santiago pedirá cambio para allá, igual el que sea de San Francisco, San Pedro, La Romana o la capital.

Naturalmente, las Aguilas y el Licey llevarían la ventaja, porque son los equipos grandes y todo el mundo quiere jugar allí.

Lo que sí pienso, es que la Liga debe legislar como en Grandes Ligas, que ningún jugador puede estar diciendo a donde quiere ir, ni mucho menos un equipo puede mostrar interés público en un pelotero que es de otra organización, porque eso no es profesional.

Al béisbol le conviene que Furcal y Wily Mo jueguen, pero hay que tener cuidado con este tipo de casos.

Bajan los bonos de Tejada

Miguel Tejada ya no es visto como la super estrella de antes, y eso se explica porque nadie lo ha reclamado en cambio.

Lo tienen como una segunda opción. Sus problemas comenzaron cuando no fue fiel a los Orioles de Baltimore al pedir un cambio.

A Tejada le dieron una fortuna para que fuera el ídolo de los Orioles y para que levantara el equipo.

Pero no pudo cumplir con esa meta.