El experto en comercio internacional Hugo Rivera atribuyó las irregulares que se están cometiendo en las importaciones de alambres y cables eléctricos a una mala implementación del Tratado de Libre Comercio con Centroamérica y Estados Unidos DR-Cafta.

Rivera, quien coordinó el equipo técnico que dirigió las negociaciones del DR-Cafta,  dijo que éste tratado no permite aplicar el beneficio de la desgravación arancelaria a productos fabricados en Centroamérica bajo regímenes especiales, como han denunciado los productores locales que ha estado ocurriendo.

Dijo que también es grave que se han permitido importaciones de alambres eléctricos originarios de China y Malasia, con tasas arancelarias inferiores al 14 por ciento, que es el arancel que deben pagar.

Explicó que si se estuviera implementado adecuadamente en el país “no pasara eso, como no pasa en Centroamérica ni en Estados Unidos, donde las aduanas controlan todas las importaciones para evitar perjuicio a sus productores locales”.

Explicó que el acuerdo con Centroamérica prohíbe el otorgamiento de aranceles preferenciales a los productos que se fabriquen en Centroamérica bajo cualquier régimen especial y en DR-Cafta se tomó esa previsión para darle facultad y defensa a los productos locales en contra de estas importaciones que distorsionan el comercio.

Señaló que los alambres eléctricos forman parte de  los productos fabricados bajo regímenes especiales.

Rivera recordó, además, que  la Dirección de Comercio Exterior (DICOEX) emitió una resolución declarando que estos alambres no cumplen para el otorgamiento aranceles preferenciales.

Hugo Rivera advirtió que si no se controla la situación denunciada,  los productos que exporte la República Dominicana para la reconstrucción de Haití no serían de origen dominicano, sino importaciones, para las cuales el país sólo servirá de puente, sin que ni siquiera recaude el pago de los aranceles correspondientes.

“Esto sería una deslealtad comercial para el país, que ha asumido parte y seguirá asumiendo parte importante de los costos para enfrentar la tragedia de Haití”, expresó Rivera.

Rivera consideró que las colecturías dominicanas  no han hecho el trabajo necesario para controlar los pesos y las medidas, lo cual trae como consecuencia que importadores puedan distorsionar los valores reales de sus importaciones, en perjuicio del productor local, como han denunciado los fabricantes locales.

Aseguró Rivera  que tampoco las colecturías han llevado correcta aplicación de la clasificación arancelaria, pudiendo hacer aparecer como  alambres y cables productos de otras clasificaciones, como los cables de fibra óptica o productos relacionados con la informática, que no pagan aranceles.

AIRD pide defender la industria nacional

El presidente de la Asocaición de Industrias de la República Dominicana (AIRD), Manuel Diez Cabral,  planteó que en el tema de los cables se debe defender a los productores nacionales. Tras preguntársele si la Asociación de Industrias de la República Dominicana no se ha reunido con Aduanas para plantear este problema,  sostuvo que  han tenido reuniones constantes con esa institución para tratar asuntos referentes a regímenes especiales, así como con la Dicoex.

“Lo que queremos es que los países de Centroamérica transparenten sus regímenes especiales y que lo haga igual República Dominicana y que se llegue a una conclusión de cuáles son los regímenes que se van a aceptar en ambas direcciones y así tener un campo de juego más equitativo entre todas las naciones integradas al Tratado de Libre Comercio”, dijo el presidente de la AIRD. Esta asociación   acordó ayer con el canciller  Carlos Morales Troncoso, convocar a la Comisión Nacional de Negociaciones Comerciales integrada por el Ministerio de Industria y Comercio, las direcciones generales de Aduanas y de Impuestos  Internos y  la Dirección de Comercio Exterior (Dicoex) para revisar la importación masiva de productos de Centroamérica hacia el país.