La Asociación de Representantes-Importadores de Vinos y Licores Asociados (RIVLAS) expresó  que las medidas propuestas en el proyecto de  reforma fiscal para aumentar de 7.5% a un 15% el  impuesto  ad-valorem a las bebidas alcohólicas lo que provocará es una caída en las recaudaciones tributarias, tal como ocurrió en el 2006, cuando fue implementada la misma disposición.

Durante una entrevista para HOY, Giuseppe Bonarelli, presidente de RIVLAS, mostró su preocupación de que el Gobierno esté basando su propuesta en aumentar un 100% el impuesto ad-valorem, lo cual se reflejaría en un aumento de un 25 por ciento del precio que paga el consumidor por las bebidas alcohólicas, tanto de las importadas como las elaboradas en el mercado local.

Bonarelli dijo que el sector de las bebidas alcohólicas  representa alrededor de un 12% de las recaudaciones fiscales del Estado, por lo que una caída en las ventas afectará los ingresos del país, además de que tiene un importante componente social.

 Pronosticó  que si se incrementan los impuestos al sector aumentará  el contrabando de bebidas, y por ende aumentará la evasión fiscal. 

Indicó que las autoridades deben recordar lo sucedido en el 2006 cuando, conforme a la Ley 496-06,  el impuesto selectivo ad-valorem se fijó en 15 por ciento (como se pretende fijar actualmente) y seis meses después, al comprobar el impacto negativo en las ventas y recaudaciones de tal medida, la misma tuvo que ser cambiada, modificando de emergencia esa legislación  para disminuir este impuesto a 7.5%, monto en el que se encuentra actualmente, conforme a la Ley 175-07.

Explicó que el sector de bebidas alcohólicas sufre la carga tributaria más alta del Caribe y Centroamérica, y que será casi imposible continuar comercializando esos productos si las autoridades aumentan más los impuestos a ese sector. 

Explicó  que el sector de bebidas alcohólicas es afectado por las medidas propuestas en la reforma fiscal que son comunes a otros sectores, como son el ITBIS, las retenciones a los dividendos, entre otros, y que en adición las autoridades proponen gravar aún más la industria aumentando los impuestos especiales a las bebidas alcohólicas, como son el impuesto selectivo específico y el impuesto selectivo ad-valorem.

Exhortó a las autoridades a que reconsideren su propuesta en lo que concierne a ese sector, y que accedan a tener un diálogo con sus   representantes, con la finalidad de  escuchar sus propuestas alternativas, las cuales han sido elaboradas y están  orientadas a lograr un aumento de las recaudaciones, afectando las ventas lo menos posible.

La frase

Giuseppe Bonarelli

Aunque las bebidas alcohólicas no son un producto de primera necesidad, el impacto económico que tienen sobre las recaudaciones es altísimo, es sobre un 10%, es un renglón importante en la economía del país, además tiene un componente social”.