Prevenir. ¿Por qué es tan importante el agua? Constituye parte esencial de las membranas celulares, ayuda a mantener la forma de la célula y de las estructuras del cuerpo.

Transporta los nutrientes y los desechos de las células y otras sustancias, como hormonas, enzimas y células sanguíneas, por lo que facilita el funcionamiento químico y el equilibrio.

Regula la temperatura corporal, absorbiendo el calor ante cualquier pequeño cambio y liberándolo a través de la transpiración.

Es un disolvente fundamental, que, al mezclarse con ciertas sustancias, reacciona formándose nuevos compuestos esenciales para la eliminación de toxinas a través de la orina. Forma parte de los fluidos lubricantes de articulaciones, tracto digestivo y genitourinario, así como saliva y otras secreciones.

Mantiene el equilibrio y la elasticidad de la piel, lo que da un aspecto más saludable.

¡Que tu cuerpo no tenga sed! Bebe cada poco tiempo (agua, infusiones, refrescos, zumos, lácteos…). En condiciones normales, se aconsejan dos litros diarios; si te expones a altas temperaturas, suma un litro más. Evita las bebidas alcohólicas y las azucaradas: no quitan la sed, sino todo lo contrario..