San Juan.- Las autoridades federales estadounidenses se incautaron de 85 libras (39 kilogramos) de cocaína en una hélice de un carguero fondeado en el puerto de San Juan que llegó de la República Dominicana.

Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, en inglés) divulgó este martes un comunicado en el que se señala que en una intervención junto a la Policía de Puerto Rico fueron incautados 39 kilos de cocaína ocultos debajo de la hélice de proa del carguero Northern Diplomat que hacía escala en el puerto de San Juan tras arribar de la República Dominicana.

El comunicado indica que el valor estimado de la cocaína en el mercado negro, que fue incautada el sábado, alcanzaría 1 millón de dólares. “Los contrabandistas utilizan medios muy creativos para ocultar sus cargas de drogas ilícitas en la cadena de suministro internacional”, afirmó Roberto Vaquero, subdirector de Operaciones de Campo para la Seguridad Fronteriza en Puerto Rico y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos.

“La experiencia de nuestros oficiales, junto con la utilización de todas las herramientas disponibles, resultó en la detección de estos narcóticos. Nuestras comunidades pueden sentirse más seguras sabiendo que la CBP defiende nuestras fronteras”, destacó el funcionario, aunque sin dar datos de personas detenidas.

El comunicado detalla que el pasado día 5, el equipo de control de contrabando de CBP inspeccionó varios contenedores que eran depositados en la embarcación cuando observaron un objeto flotando cerca del buque.

Tras ser recuperado del agua se comprobó que contaba con cocaína en su interior. Posteriormente, un equipo de buceo de la Oficina de Policía de Puerto Rico realizó un examen de la estructura de la embarcación y descubrió dos bolsas de red marina con 29 ladrillos adheridos a la hélice de proa.

Un total de 31 paquetes fueron recuperados y dieron positivo a las propiedades de la cocaína. La Administración de Control de Drogas (DEA, en inglés) asumió la custodia del contrabando incautado para su investigación.

El comunicado subraya que la misión de CBP es salvaguardar las fronteras de Estados Unidos, protegiendo así al público de personas y materiales peligrosos al tiempo que mejora la competitividad económica global de la nación al permitir el comercio y los viajes legítimos.