La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) incautó en La Romana más de 500 mil pesos en efectivo en la vivienda de uno de siete hombres detenidos la madrugada del viernes en San Rafael del Yuma con 155 paquetes de cocaína, alijo que en el laboratorio forense pesó 188 kilos 79 gramos, informó este sábado la agencia antinarcóticos.

La alta suma alegadamente fue hallada en la casa del nombrado Eduardo Tolentino Valerio, quien en las próximas horas será remitido a la Procuraduría a Fiscal de Higüey para que sea sometido a la justicia junto a los otros detenidos. Todos fueron trasladados a la sede de la DNCD, en Santo Domingo, para ser interrogados.

Tolentino Valerio fue detenido horas después del arresto de Eleuterio Zorrilla Echavarría, Zony Ramírez de la Cruz, Ramón Medina y Martín Leonardo Liriano, alias Armandito. Luego fueron atrapados en La Romana Carlos Livio Peña y José Romero de los Santos, apodado José Cubeta, dice un comunicado emitido por el vocero de la DNCD, Roberto Lebrón.

Además del dinero, la agencia antidrogas logró recuperar una serie de documentos que comprometen la responsabilidad de Tolentino Valerio, entre ellos copias de envío de dinero a varios de los detenidos durante la denominada Operación Tormenta Marítima, llevada a cabo por la DNCD por aire, mar y tierra. Zorrilla Echavarría, quien resultó herido de bala durante la operación, sigue recluido en el hospital de Higüey.

La cocaína, que se presume sería llevada a Puerto Rico, fue encontrada en la lancha de nombre Efa, serie E115-1449LR, de 21 pies de eslora. El grupo de detenidos forma parte de una estructura de narcotráfico internacional que se mueve entre Miches, la Romana e Higüey, de acuerdo al informe de la agencia.

Estos hombres lograron reagruparse después de que en años anteriores las redes a que pertenecían fueron desmanteladas. Estaban de nuevo recibiendo cocaína para enviarla a Puerto Rico, pero aún faltan otros por ser detenidos para también ponerlos en manos de la justicia, dice el comunicado del organismo.

Entre los perseguidos figura el nombrado Armando Bueno, capitán en la embarcación, quien se lanzó de la misma al notar la presencia de los oficiales antidrogas, adscritos a la División Táctica de Investigaciones Sensitivas (DITIS), la que intercambio datos al respecto con los agentes de la Administración Especial Antidrogas de los Estados Unidos (DEA).