La incertidumbre y desconcierto son absolutos después de que el Ministerio de Educación aplazara este jueves la presentación del plan para afrontar el año académico en la actual situación de pandemia.

A pocos minutos antes del inicio de la rueda de prensa en la que se darían detalles del plan académico, el Ministerio informó de que aplazaba la convocatoria hasta el próximo lunes.

El argumento es que “organismos nacionales e internacionales han mostrado interés en ser parte de las soluciones” que se van a presentar, informó la institución a través de Twitter.

La fecha. Mientras tanto, miles de familias no saben a qué atenerse en lo referente a la actividad lectiva, pago de matrículas y compra de útiles escolares, con lo que eso implica, además, en cuanto a la conciliación del cuidado de los niños con la vida laboral.

De hecho, ahora no está claro si sigue en pie la fecha del inicio del curso.
El presidente Luis Abinader, en su discurso de investidura el pasado domingo, dijo que las clases empezarían el lunes 24 de agosto, pero hoy, tras el aplazamiento del plan, este punto ya no está claro.

La portavoz del Ministerio de Educación dijo a Efe que la fecha de inicio del curso dependerá de las propuestas que se reciban por parte de organismos nacionales e internacionales que se han sumado a ultima hora a la confección del plan.

Fata de planificación. Las nuevas autoridades educativas, que tomaron posesión este lunes, un día después de la investidura de Abinader, no recibieron ninguna esquema de planificación, sugerencias o directrices del equipo antecesor.

“No nos dejaron absolutamente nada”, se quejó el ministro de Educación, Roberto Fulcar, al asumir el cargo y comenzar a afrontar el reto de garantizar la docencia en estas circunstancias de pandemia añadidas al déficit educativo dominicano.

En su discurso de investidura, Abinader ya se refirió a “la crítica situación que arrastra la educación dominicana”, agravada a causa de la COVID-19 y que “pone en serias dificultades” el año escolar 2020-2021.

Tables. Con el propósito de preservar la salud de la comunidad educativa, Abinader anunció que se recurrirá a la educación a distancia, para lo cual se comprarán cerca de dos millones de tabletas o portátiles para proporcionar medios a todos los alumnos del país.

Además, el Gobierno precisa de la implicación de las operadoras telefónicas y asegurar la conectividad del sistema educativo en un tiempo mínimo.

La baja calidad de la educación dominicana ha quedado de manifiesto en los informes PISA desde 2015, que sitúa al país caribeño en el último lugar de 79 países en matemáticas y ciencias y en el penúltimo en lectura, a pesar de que el presidente saliente, Danilo Medina, dedicó el 4 % del PIB al sector de la Educación durante sus dos mandatos (2012-2020).