Al ser reanudada ayer la audiencia del caso Odebrecht luego de que un abogado defensor y una jueza fueran afectados de covid-19, los incidentes y excepciones planteados por los abogados de los seis acusados impidieron otra vez la lectura de la acusación formulada por el Ministerio Público.

La primera cuestión que motivó incidentes de parte de los togados fueron las medidas sanitarias adoptadas por el Poder Judicial para evitar contagios de covid-19, especialmente en lo relativo al tamaño de la audiencia y la cantidad de personas que debe acoger.

Los representantes de los acusados Ángel Rondón, Víctor Díaz Rúa, Andrés Bautista, Roberto Hernández y Conrado Pittaluga solicitaron a las juezas del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que la audiencia fuera interrumpida hasta que el Poder Judicial tome nuevas medidas preventivas ante el hecho de que dos personas resultaron infectadas del virus.

Por otro lado, la defensa de Conrado Pittaluga alegó que el juicio no podía empezar hasta que fueran convocados los testigos y peritos o que, por lo menos, les fueran notificados a las partes el domicilio legal y contactos de estas personas. A este pedimento se sumaron las defensas de Ángel Rondón, Tommy Galán y Roberto Hernández.

A su vez, los abogados de Bautista solicitaron el sobreseimiento del juicio hasta tanto el MP concluya la nueva investigación que lleva a cabo por el caso (denominada Odebrecht 2.0) y presente acto conclusivo sobre esta última.

Miguel Valerio, defensor de Díaz Rúa, retomó desde el “aspecto técnico procesal” el tema de los archivos definitivos en favor de ocho investigados del caso al pedir que el tribunal ordene la extinción, archivo y rechazo de la acción contra su defendido, Víctor Díaz Rúa, ya que “la acción pública es una e indivisible y, por lo tanto, no se puede archivar para unos cuantos imputados y para otros no sin que haya ninguna repercusión”.

Réplica del MP. El MP solicitó que se rechacen los pedimentos de cambiar la sala de audiencia, sobreseer el juicio hasta que finalice la pandemia, la comparecencia de todos los testigos a la vez y que se extinga la acción penal contra los imputados que así lo habían requerido.