El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales clausuró una incineradora de desechos biomédicos, debido a que operaba de manera inadecuada, vertiendo residuos de sangre al suelo, con materiales en descomposición al aire y falta de protección a los empleados.
Se trata de Alianza Innovadora de Servicios Ambientales (Aidsa), ubicada en la calle San Miguel, de Hato Nuevo, Santo Domingo Oeste. La empresa maneja los residuos de casi todos los hospitales públicos y de algunas clínicas de Santo Domingo.
Entre los hallazgos en la empresa están: tanques con residuos biomédicos en proceso de descomposición y a la intemperie; bolsas plásticas con sangre depositada en el suelo y residuos de sangre vertidos directamente al suelo.
Los técnicos ambientales también detectaron almacenes con productos vencidos sin el confinamiento adecuado y que los empleados no utilizan la vestimenta apropiada para prevenir el contagio por posibles agentes patógenos de los desechos biomédicos.
Además, se encontraron tanques llenos con residuos sin que el proceso de incineración haya sido completado o parcialmente incinerado y que todas las aguas del lavado de tanques y de neutralización son drenadas a una canaleta que descarga directamente al suelo.
La incineradora no tiene vehículos especiales para transportar los residuos biomédicos, ni almacén refrigerado para los mismos. Los residuos vienen dentro de fundas amarradas y son introducidos de la misma manera al incinerador, y no está establecido un sistema de segregación (división) de los residuos biomédicos en los centros de salud, dice el reporte. El cierre fue dirigido por la directora de Calidad Ambiental, Olga Rosario, y el encargado de Protección Ambiental, coronel Julio César Burgos. AIDSA maneja entre 80 y 100 tanques de 55 galones de desechos biomédicos por semana. Trata, además, mediante incineración y neutralización de materiales peligrosos y no peligrosos, sólidos y líquidos, incluyendo basura del exterior.
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Seis inspecciones
En el informe de Calidad Ambiental se establece que la empresa había sido inspeccionada en seis ocasiones, para dar seguimiento a sus autorizaciones ambientales, por lo que se notifició a AIDSA, de manera reiterativa, la necesidad de que cumplan con una serie de disposiciones avaladas en sus permisos ambientales y otros requerimientos, entre los que se encuentran: controles en los incineradores, manejo adecuado de cenizas y residuos líquidos, mediciones de todos los parámetros de calidad de agua y aire indicados en las normas correspondientes y el establecimiento de los procedimientos necesarios para sus actividades.