París EFE. La situación de las lenguas indígenas en México es preocupante, alertaron ayer en París dos de sus autores, que criticaron el monolingüismo de ese país pero destacaron la fructífera retroalimentación que se da con el castellano.
Lo que hacemos es casi clandestino, se quejó el escritor mazateco Juan Gregorio Regino en relación con la edición en su lengua y en otras indígenas mexicanas durante un debate en la capital francesa.
Y de esa clandestinidad dio prueba el hecho de que él y la autora maya Briceida Cuevas Cob se dirigieran a un reducido auditorio no dentro, sino fuera del Salón del Libro de París, que hasta el 18 de marzo tiene a México como país invitado de honor. En conversación casi íntima, ante apenas una veintena de espectadores convocados en el Museo Quai Branly, ambos se quejaron de que su obra esté ausente de una feria en la que se celebra a México, sin embargo, por ser mosaico cultural. Se está recuperando una tradición ya bastante arraigada de la aspiración, que es la parte académica, explicó Regino a EFE.