La industria azucarera atraviesa momentos difíciles y requiere de una nueva mentalidad empresarial para sobrevivir en el competido mundo de la economía global y la apertura de los mercados, afirmó Felipe Vicini. “Se trata de cambiar o sucumbir”, aseguró Vicini durante una reunión con el personal ejecutivo de los ingenios Cristóbal Colón, Caei y Angelina, efectuada en el hotel Hilton, en Santo Domingo. 

“La industria azucarera en general -y nuestra empresa en particular- atraviesa momentos difíciles y encara los grandes retos, así como las oportunidades, que le ponen enfrente los mercados abiertos. La única manera de sobrevivir es respondiendo a los desafíos que nos imponen los nuevos tiempos”, expresó.

Durante la reunión, denominada “Sí al Cambio”, el señor Vicini explicó que esos ingenios están desarrollando un plan de acción que incluye la modernización operativa de las labores agrícolas y fabriles; una mayor inversión en los planes sociales que tradicionalmente desarrollan en las comunidades cañeras, y la internalización de un concepto de trabajo en que cada cual asume su responsabilidad con el cambio.

Detalló que se han hecho importantes inversiones para aumentar los procesos de mecanización del corte y el alza de la caña en la próxima zafra, y que se está desarrollando un ambicioso programa social en el área de salud, educación, vivienda, deporte y recreación en las comunidades donde operan sus ingenios. Aseguró que ese programa aumentará la eficiencia y la rentabilidad de la industria, lo cual se traducirá en un apreciable aumento en la producción, al tiempo que mejorará considerablemente las condiciones de trabajo.

El señor Vicini subrayó que el cambio es la única constante en el siglo XXI, y advirtió que quien no es capaz de adaptarse quedará rezagado con grandes riesgos de fracasar. “Está claro que el miedo al cambio, el miedo a lo desconocido, puede paralizarnos hasta el punto del fracaso. Solo quienes están dispuestos a adaptarse a las diversas necesidades de nuestro mundo, están en capacidad de tener éxito, tanto en los negocios como en la vida cotidiana”, dijo. El ejecutivo azucarero consideró asimismo que se necesita del compromiso de todo el personal para sacar adelante el proceso de transformación que requiere la empresa.

Indicó que la reducción de la producción en la pasada zafra debe ser motivo de reflexión y de inspiración para el proceso de cambio que se ha propuesto implementar en los ingenios para convertirlos en un modelo económico y de responsabilidad social.

El señor Vicini afirmó que ha iniciado con gran entusiasmo una nueva etapa de desarrollo empresarial que le permitirá recrear y fortalecer una nueva visión de responsabilidad corporativa para el desarrollo de los negocios. “Depende ahora de nuestro compromiso personal, de decir “Sí al Cambio”, el que este programa de transformación se traduzca en una mayor eficiencia en nuestras operaciones y en más y mayores éxitos para el grupo azucarero como corporación, y para todos y cada uno de nosotros como personas”, expresó.  Durante la reunión, la directora financiera de la empresa, Luisa Josefina Luna, presentó el plan de negocios, y la gerente de Bienestar Social, Carmen Ogando, expuso el programa de esa área. El director del Instituto Dominicano de Desarrollo Integral, David Luther, explicó el programa de modernización de viviendas que se desarrollará en las comunidades cañeras de los ingenios Cristóbal Colón y Angelina, y el presidente de Newlink Comunications, Sergio Roitberg, sobre el plan de comunicaciones.

Por su parte, el vicepresidente de Comunicaciones Corporativas, Campos de Moya, fue el anfitrión de la reunión y exhortó a los asistentes a detectar y prever los cambios que se producen en la industria para prepararse a enfrentarlos antes de que se conviertan en un problema.

La mesa principal estuvo integrada, además de los señores Vicni y De Moya, por los señores José María Cabral Vega, Indiana Peña, Rafael Velez y Franchesco Somoggy Perlac.