Hoy 
Para algunas personas, entender que la temática a tratar sobre artesanías, comidas y músicas son industrias, no es tan fácil de entender, pero trataremos en este breve artículo de justificarlas y hacerlas entendibles.
El concepto industria descansa en una nave industrial con maquinarias, equipos, hombres trabajando o dando como resultado un bien final que generalmente vemos hechos para un consumo tradicional, pero no todo es así.
Nuestras artesanías. Las artesanías, que hoy representan cerca de unos trescientos millones de dólares o unos diez mil millones de pesos en el mercado, la encontramos cumpliendo esos requisitos al elaborarse en naves industriales sean pequeñas o medianas, en parques industriales o en los hogares, pero debemos esperar que las mismas expongan nuestras culturas. Somos un pueblo con una mezcla de culturas debido a las inmigraciones.
Estos bienes artesanales son una de las mejores alternativas para vender nuestro país a los turistas que nos visitan y que desean llevarse algún recuerdo del país. Son muchos, bellos y variados, aunque deben ser cada vez mejores.
Ahora bien. ¿Cuál es la artesanía que debemos hacer y promover? Esto dependerá de muchos factores. Obviamente, la educación es lo principal, pero es también conocimiento de nuestra historia, así como de nuestra imaginación.
De las comidas debemos enfatizar que debido a la diversidad cultural que tenemos por las diferentes inmigraciones, nuestra culinaria no es sólo diversa sino muy sabrosa. En el país tenemos desde las entradas y entremeses, a los platos fuertes, postres y bebidas, comidas que en lo personal no explotamos pero que pueden reflejar nuestra historia e innovaciones culinarias.
Escuelas culinarias
Cierto es que nos hacen falta buenas escuelas de culinaria con un sentido práctico en lo cultural, pero que motiven a los emprendedores a utilizar los bienes producidos para que sean transformados en ricos alimentos.
Tenemos cultivos como la yuca que, si vemos su carta de productos con detalles, nos sorprendemos de las formas que podemos presentarla y consumirla nosotros o los visitantes, para mencionar un solo caso.
Nuestro mayor énfasis lo hacemos cuando escribimos o hablamos del chilindrón, no importa con cual especie se hace, ya que se pueden elaborar y realmente lo hacemos con terneros, cerdos, chivos, ovejas, aves e inclusive con peces, todos ricos o que pueden reflejar nuestra cultura.
La música local. Sobre la música es más fácil de entender, ya que el comercio del sector se ha encargado de difundirla. Sin embargo en lo personal y sin ser experto en la materia creemos que no se ha enfatizado lo suficiente para mostrar esa cara importante de nuestra cultura, como la música.
Es cierto que tenemos muy buenos autores e intérpretes que nos llenan de orgullo, pero como sociedad debemos rescatar, por bien de nuestra cultura, nuestra música, la cual está hoy a nuestro juicio muy contaminada.
Una buena educación musical permitirá que en los centros turísticos se ejecute una música de calidad que ayudará grandemente a expandir nuestra música, básicamente el merengue, expandiendo de esta manera el mercado, pues cada año nos visitan nuevos millones de turistas que, con los años, y de hacerlo bien, comprarían y difundirían nuestra música.
Industrias culturales
Los tres temas tratados son arte, pero si los vemos a fondo son industrias o empresas que generan decenas de miles de empleos, de millones de pesos y monedas duras, pero lo bueno es que si nos educamos propiamente podemos sacar de estas industrias culturales mucho más para los que participan y el país.
Eduquemos en artesanías a los artesanos, en culinaria a los cocineros, en música a los intérpretes, por el bien de todos. Y esto, aunque muchos crean que son necesarios miles de millones de pesos !que va!, son chines, para lo que redituarían a muy corto plazo solo sirviendo a la industria sin chimeneas, la turística.
Sólo educando avanzaremos y ganaremos todos en esta industria que está en permanente desarrollo.
